La NBA suspendió por tiempo indefinido a Draymond Green, alero de los Warriors de Golden State, menos de 24 horas después de que golpeó en el rostro a Jusuf Nurkic, pívot de los Suns de Phoenix, por lo que se le marcó una falta flagrante de segundo grado y se le expulsó.
La liga anunció la sanción impuesta el miércoles por su jefe de operaciones Joe Dumars. Green ha quedado suspendido de inmediato.
Es la segunda vez que se le suspende en esta temporada.
“Se requerirá que él cumpla ciertas condiciones de la liga y del equipo antes de que vuelva a jugar”, indicó la NBA.
Destacó que “este resultado toma en cuenta el historial de actos repetidos de conductas antideportivas por parte de Green”.
El jugador fue expulsado por 18va vez en su carrera, la mayor cifra entre los basquetbolistas que están en activo dentro de la NBA.
Green y Nurkic forcejeaban para colocarse en una mejor posición al comienzo del tercer periodo. El forcejeo arreció, y el alero de Golden State pareció perder el equilibrio.
Luego, de forma inexplicable, dio un giro y propinó el golpe en la cara a Nurkic.
El bosnio cayó de inmediato. Se levantó después y pudo continuar en el partido.
Los árbitros revisaron la jugada antes de marcarle a Green una falta flagrante de segundo grado, que deriva en expulsión automática.
“Eso no tuvo nada que ver con el basquetbol”, dijo Nurkic. “Yo sólo estaba ahí, tratando de jugar”.
Ha pasado menos de un mes desde que Green fue suspendido cinco duelos por la NBA, tras sujetar el cuello de Rudy Gobert, en un intento aparente por asfixiarlo, durante un altercado en noviembre.
Hay pocos precedentes de suspensiones indefinidas en la NBA. En 2010, el entonces comisionado David Stern suspendió indefinidamente a Gilbert Arenas, base de Washington, por llevar armas al vestuario del equipo.
Arenas fue suspendido después 50 partidos.
“Su conducta... me llevó a concluir que él no está apto actualmente para entrar en la cancha durante un partido de la NBA”, dijo entonces Stern.
