Había dos opciones para los Mavericks. Ambas implicaban hacer las maletas, ya fuera para viajar a Boston o para irse de vacaciones.
El descanso tendrá que esperar, y los Mavs están encantados por ello.
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Luka Doncic anotó 29 puntos, incluidos 25 en una frenética primera mitad, y Dallas se negó rotundamente a ser barrido en las Finales de la NBA, al triturar el viernes 122-84 a los Celtics.
Las Finales no se han terminado, gracias a una de las peores palizas en estas instancias.
“Es bastante simple. No tenemos que complicarnos. No es una cirugía”, dijo el entrenador de los Mavs, Jason Kidd. “Nuestro equipo estaba listo para jugar. Los rivales estaban dispuestos a celebrar pero hemos dado un argumento. Estábamos desesperados y tenemos que seguir jugando así”.
Kyrie Irving añadió 21 unidades para que los Mavs sobrevivieran en el cuarto partido. Los dos astros de Dallas se dieron el lujo de marcharse desde el final del tercer periodo, cuando los Celtics quedaron sin posibilidad alguna de rescatar este duelo.
Dallas dominó el encuentro de principio a fin. Tomó una ventaja de 13 puntos después de apenas un cuarto, la amplió a 26 en el intermedio y llegó a colocarla en 48 en el tercer periodo, antes de que ambos equipos firmaran el resultado y enviaran a jugar a sus respectivos suplentes.
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“Ellos tratan de cerrar la puerta, pero lo más difícil en esta liga es hacerlo ante un grupo que no tiene nada que perder”, explicó Kidd. “Esta noche vieron eso”.
El margen final de 38 puntos representó la tercera peor paliza en un partido de las Finales de la NBA en la historia, sólo detrás del 96-54 que Chicago le recetó a Utah en 1998 y del 131-92 conseguido por los Celtics ante los Lakers de Los Ángeles en 2008.
La peor zarandeada que se habían llevado los Celtics antes del viernes en las Finales se remontaba a 1984, cuando cayeron por 137-104 ante los Lakers.
Ésta fue peor. Por momentos, mucho peor.
Los 48 puntos con los que Dallas llegó a aventajar, representan el peor déficit que han enfrentado los Celtics en toda la temporada.
Los Celtics vieron reducida a 3-1 su ventaja. Serán anfitriones el lunes, en el quinto encuentro.
“La preparación no garantiza un éxito automático”, explicó Joe Mazzulla, entrenador de los Celtics. “Creo que tuvimos una gran práctica de tiro. Pienso que tuvimos ayer una gran sesión de video y que los chicos llegaron con las intenciones correctas. Simplemente creo que las cosas no nos salieron y que Dallas nos superó. Jugó más duro”.
Fue la primera derrota de Boston en cinco semanas. Los Celtics habían ganado 10 duelos seguidos de postemporada, la mayor racha en la historia de la franquicia.
Además, Boston dejó escapar la oportunidad de ser el primer equipo en la historia que gana la final de conferencia y las Finales por barridas de 4-0.
Jayson Tatum anotó 15 puntos, Sam Hauser agregó 14, mientras que Jaylen Brown y Jrue Holiday finalizaron con 10 cada uno por los Celtics.
“Esto no cambia nada”, dijo Doncic. “Como dije al comienzo de la serie, es el primer triunfo de cuatro, y tenemos que seguir creyendo hasta el final”.