El golfista estadounidense Tiger Woods y su hijo Charlie de 15 años lograron cinco birdies consecutivos, (cuando se termina un hoyo en un golpe menos del par asignado), en los últimos nueve hoyos este sábado, para un marcador de 59, 13 bajo par en el formato de scramble, lo que les permitió compartir el liderato del PNC Championship.
Esta fue la primera competencia de Woods padre desde que se sometió a una cirugía de espalda el pasado septiembre.
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El astro dijo que programó esa cirugía —la sexta en su espalda baja en los últimos 10 años— con el objetivo de recuperarse a tiempo para jugar con su hijo por quinto año consecutivo.
Les acompañan en la cima los últimos dos campeones —Bernhard Langer y su hijo Jason, así como Vijay Singh y su hijo Qass.
Woods realizó una serie de buenos tiros, incluyendo un “wedge” que dejó la pelota apenas a pulgadas del hoyo 7, un recorrido corto de par cuatro.
Sin embargo, minimizó su juego, al sugerir que todavía estaba muy oxidado. Enfatizó que lo más importante era pasar 36 hoyos en un día fresco en el Ritz-Carlton Club Orlando con su hijo, un estudiante de segundo año en la Benjamin School de North Palm Beach.
Su hija, Sam, fue caddie de su Woods por segundo año consecutivo. Elin, madre de Sam y Charlie, estaba entre los presentes en la galería en un torneo donde lo que más importa es la familia.
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“Estamos tratando de ejecutar cada tiro el uno para el otro, y de complementarnos”, dijo Woods. “Creo que lo hicimos muy bien prácticamente todo el día”, indicó el astro.
“Nos apoyamos mutuamente, lo cual fue genial y Charlie hizo la mayoría de los putts hoy”, añadió.
