Lo que comenzó como una tragedia ha tomado un giro inesperado y emotivo para Ryan Quigley, uno de los heridos en el atentado de Año Nuevo en Nueva Orleans. Fanático de los Philadelphia Eagles y exjugador de fútbol americano en Princeton, Quigley perdió a su amigo Martin “Tiger” Bech en el ataque que dejó 14 víctimas fatales y decenas de heridos.
Ahora, menos de dos meses después, tendrá la oportunidad de asistir al Super Bowl LIX, un gesto que ha conmovido a muchos. El equipo de los Philadelphia Eagles sorprendió a Quigley con dos entradas para el partido del 9 de febrero, en un emotivo encuentro en sus instalaciones de entrenamiento.
PUBLICIDAD
Ryan Quigley herido en el atentado en Nueva Orleans recibe un gran regalo de los Philadelphia Eagles
Acompañado por la hermana de Bech, Ginnie, Quigley recibió la noticia de manos del ala defensiva Brandon Graham y del exjugador Jason Kelce. “Queríamos contarte la verdadera razón por la que te trajimos”, dijo Graham antes de hacerle la gran revelación. “Está bien si no te sientes con ganas, pero nos encantaría que vinieras al Super Bowl”.
El momento fue emotivo para Quigley, quien, con lágrimas en los ojos, recordó a su amigo fallecido. “Tiger era el mayor fanático. El año pasado fuimos a todos los partidos en casa”, compartió. “Le prometí que si llegábamos al Super Bowl, lo llevaría conmigo. Nada me gustaría más que cumplir esa promesa”.
La reacción de Quigley conmovió a todos en la sala. Entre abrazos y palabras de aliento, Graham le aseguró: “Él vive a través de ti”. El impacto de la tragedia ha sido profundo no solo para Quigley, sino también para la familia Bech.
Ryan Quigley y la familia de Martin “Tiger” Bech más unidos que nunca
Jack Bech, hermano menor de Martin y jugador de la Universidad Cristiana de Texas, rindió un emotivo homenaje a su hermano en el Senior Bowl. Llevando el número 7 que Tiger usó en Princeton, Jack atrapó seis pases y anotó el touchdown ganador del partido, llevándose el premio al Jugador Más Valioso.
“Todo lo que un hermano mayor quiere es ver a su hermano menor triunfar”, dijo Jack tras el partido. “Él ha sido mi modelo a seguir toda la vida. La persona que quería ser”. El camino hacia la recuperación para Ryan Quigley y la familia Bech sigue siendo difícil, pero no están solos.
