El mundo del cine y la televisión ha perdido a una de sus figuras más queridas. La actriz Teri Garr, reconocida por su talento en la comedia y por sus roles inolvidables en películas como “Tootsie” y “El joven Frankenstein”, así como su trabajo en “Friends”, falleció a los 79 años en Los Ángeles tras una larga batalla contra la esclerosis múltiple.
La noticia fue confirmada por su representante, quien destacó la fortaleza de Garr para enfrentar esta enfermedad, que le fue diagnosticada en 1999, y un aneurisma en 2006 que la mantuvo en coma durante varios días.
PUBLICIDAD
Teri Garr deja un enorme vacío en el mundo del entretenimiento
Nacida en Lakewood, Ohio, en 1944, Garr creció en una familia ligada al espectáculo. Su padre fue un actor de Broadway y su madre una bailarina en el prestigioso Radio City Music Hall de Nueva York. Desde temprana edad, mostró una inclinación por el arte, lo que la llevó a estudiar en el renombrado Lee Strasberg Theatre and Film Institute y el Actors Studio en Nueva York.
Garr comenzó su carrera como bailarina de reparto en películas de Elvis Presley en los años 60 y pronto incursionó en la televisión, apareciendo en programas icónicos como “Star Trek” y “The Sonny and Cher Comedy Hour”. Uno de sus papeles más memorables llegó en 1974, cuando interpretó a Inga, la asistente del Dr. Frankenstein en “El joven Frankenstein”.
En 1982, Garr alcanzó el punto culminante de su carrera con su papel en “Tootsie”, junto a Dustin Hoffman, donde interpretó a una actriz insegura. Esta actuación le valió una nominación al Premio de la Academia como Mejor Actriz de Reparto, consolidándola como una de las actrices más queridas de su generación.
Hollywood pierde a otra estrella
Garr también es recordada por su papel como la madre de Phoebe Buffay en “Friends”, donde su caracterización dejó una huella en los fanáticos de la popular serie. La actriz Lisa Kudrow expresó su pesar en redes sociales, recordando a Garr como una “influencia cómica y un verdadero genio de la actuación”.
A lo largo de su carrera, Garr defendió la importancia de crear personajes femeninos complejos que desafiaban los estereotipos de género, alejándose de los papeles tradicionales de “femme fatale”. Su postura inspiró a muchas actrices que, al igual que ella, luchan por una representación más auténtica de las mujeres en la industria del entretenimiento.
