La segunda temporada de Andor ya está disponible en Disney+ con sus primeros tres episodios, y reafirma su posición como una de las series más maduras y complejas dentro del universo de Star Wars. En esta entrega, la historia profundiza en las tensiones políticas que preceden a los eventos de Rogue One, al tiempo que explora con mayor profundidad a sus personajes.
Metro Puerto Rico conversó en exclusiva con Diego Luna, quien vuelve a interpretar a Cassian Andor y también funge como productor; y con Adria Arjona, quien da vida a Bix Caleen, sobre el desarrollo emocional de sus personajes, los retos que enfrentan en pantalla y hasta sobre sus platos latinos favoritos.
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Adria, esta temporada de Andor actúa como una antesala a Rogue One. Ya conocemos el final, pero ¿cómo afectó esto tu acercamiento al personaje de Bix, que ahora parece más vulnerable y emocionalmente complejo?
—Bueno, Bix está en el punto más bajo de su vida cuando la volvemos a ver. Una de mis preguntas a Tony (Gilroy, guionista) fue: ¿cómo salvarla de lo que el Doctor Gorst le hizo? Ese trayecto emocional fue de lo más interesante para mí esta temporada. Y entre todo ese caos, encontrar una historia de amor bonita y un hogar en Cassian fue lo más importante para ella.
Diego, tú también produces esta serie. ¿Cómo influiste en el desarrollo de Cassian, en una temporada que se siente intensamente política, pero también muy íntima y humana?
—Hay varias razones por las que esta temporada se siente distinta. Está la complejidad política, sí, pero también el retrato humano de los personajes. Nos acercamos a su cotidianidad, a sus contradicciones. Andor no es una historia de buenos contra malos, sino de gente común sobreviviendo en tiempos oscuros. Y Tony lo cuenta con mucha honestidad. Me siento afortunado de interpretar un personaje tan rico, con tantas capas.
¿Qué mensaje creen que deja esta temporada para el mundo actual?
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Diego—El valor de la comunidad. La fuerza que tiene actuar en conjunto. Cuando nos unimos, somos más fuertes. Creo que ese es el mensaje central.
Y si pudieran cocinarle algo a la Rebelión, ¿qué plato típico prepararían?
Adria—Alcapurrias o un buen mofongo. Pero también tengo que hablar de Guatemala: un desayuno chapín, con café y champurradas.
Diego—Tacos al pastor. Porque donde come uno, comen 200.
