Investigación determina que el Covid-19 trastorna el sueño

A parte del sueño, contagiarse de Coronavirus podría alterar también los estados de ánimos

Son múltiples las investigaciones y determinaciones a raíz de los distintos efectos en mediano y largo plazo con respecto al Covid-19. Uno de los más reciente es por parte de un grupo científico del Centro de Cognición y Toma de Decisiones de la HSE y de la Academia Médica del Estado Central de Rusia en el que concluyó en graves niveles de trastornos del sueño en muchas de las personas que padecieron de Coronavirus.

El hallazgo fue reseñado en los últimos días por la revista científica Neuroscience and Behavioral Psychology, en el que también se determinó que el estado de ánimo post Covid y los episodios de fatigas se incrementaron y variaron drásticamente en el cuerpo humano de los afectados.

Estudio

Para lograr los resultados y conclusión, los investigadores estudiaron a 119 personas hospitalizadas por padecer de Coronavirus. En ellos, se les entregó cuatro cuestionarios que trataban sobre estados de ánimos como ansiedad, depresiones, fatigas y trastornos del sueño. De los pacientes analizados, se entrevistaron por parte de psiquiatras a quienes reflejaron puntuaciones altas en los resultados de dichos cuestionarios.

Resultados

Las conclusiones de las pruebas detectaron altos niveles de trastornos del estado de ánimo y del sueño entre los participantes en el estudio. En resumen, el 28 % de los encuestados informó de un deterioro del estado de ánimo, el 27 % experimentó una alteración de la calidad de su sueño y el 73 % sufrió fatiga.

Declaraciones

La doctora Ainur Ragimova, una de las responsables de la investigación, indicó que los efectos post Covid-19 son los grandes causantes de la pérdida de fuerzas en el cuerpo humano, derivado en especial por el mal dormir y distintos trastornos de sueños, por lo tanto, es fundamental investigar por separada cada anormalidad.

“Sus problemas de sueño se atribuyen más a menudo a alteraciones fisiológicas, como las consecuencias de una estancia en cuidados intensivos y los efectos de una falta de movimiento prolongada, pero no a trastornos del estado de ánimo. Nuestros datos subrayan una vez más que, cuando los pacientes se quejan de problemas de sueño, es necesario examinar su estado mental tanto durante su enfermedad como una vez finalizada la cuarentena”, concluyó la experta rusa.

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