Salud

¿El cáncer de mama afecta la fertilidad?

Un especialista aborda factores de riesgo, tratamientos y posibilidades para quienes desean tener un bebé tras recibir tratamientos.

De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), el cáncer de mama es el tipo de cáncer más común, del que se presentaron más de 2.2 millones de casos en el 2020 y del que se estima que una de cada 12 mujeres lo padecerá a lo largo de su vida. Es, además, la principal causa de mortalidad entre las mujeres.

Nueva Mujer conversó con el doctor Hugo Vázquez García, ginecólogo-oncólogo, quien labora en el Hospital Christus Muguerza de Alta Especialidad en Monterrey, México. El galeno explicó que “las mujeres son más propensas a padecer cáncer de mama, con un riesgo 100 veces mayor que los hombres”.

Dado que el riesgo ha cambiado en los últimos años, “se sugiere que las mujeres de 20 años se realicen al menos una exploración a cargo de un especialista al menos cada tres años hasta los 39 años”, ya que a los 40 se recomienda una mamografía anual. Asimismo recomendó autorevisarse mensualmente para identificar posibles anomalías.

¿Qué es lo primero que debe hacer una mujer que sospecha tener cáncer de mama?

— Lo primero es acudir a un médico especializado en lesiones mamarias, como ginecólogo oncólogo, cirujano oncólogo o un mastólogo, que podrán indicar los estudios adecuados a realizar y valorarlos para realizar un diagnóstico adecuado. En caso de una imagen sospechosa, se realizará una biopsia.

¿Cómo identificar algo anormal en las mamas?

—Las pacientes deben poner atención a la simetría de las mamas, al contorno de los pezones y la piel. Busquemos siempre que no haya hendiduras en la piel, bultos o nódulos, hinchazón o celulitis, que no se perciban cambios de coloración, enrojecimiento o descamación tanto en la piel o en los pezones, e, incluso, secreción por el pezón cremosa, blanca o sanguinolenta.

Una vez identificado el tipo de cáncer que tiene la paciente, ¿qué sigue?

—Se debe identificar si este se alimenta o no de sus hormonas. A la par se le piden estudios de extensión, ya sea del tórax, del abdomen o de la otra mama, cuya finalidad es saber si el resto de sus órganos están sanos y corroborar que el problema solo esté en su mama.

Entonces, al tener los resultados de los estudios de extensión, de la biopsia y de la inmunohistoquímica de la biopsia, podemos tener la información completa para poder decir en qué etapa clínica está la paciente, es decir, qué tan avanzado es su cáncer y, a partir de ello, plantear un tratamiento, que pueden ser algún tipo de cirugía, quimio, radio y hormonaterapia o terapias blanco.

Es frecuente que las pacientes con cáncer sean cada vez más jóvenes o en edad fértil. ¿A qué factores se debe?

El cáncer de mama no lo podemos prevenir, pero, al ser una enfermedad que presenta factores de riesgo asociados, existen algunos que se pueden modificar y otros que no. Por ejemplo, una paciente que tuvo familiares con antecedentes de cáncer de mama, como su mamá o abuela materna, tiene más posibilidad que aquellas que no enfrentaron esta situación. Esa modificación genética ya está en su sangre y no es modificable.

Las pacientes de raza blanca, aquellas con tejido mamario denso y las mujeres que recibieron radioterapia por un linfoma son aquellas que tienen mayor riesgo de tener lesiones.

¿Por qué las pacientes jóvenes son más susceptibles a tener cáncer de mama hoy en día?

— Hoy las mujeres tienen mayor participación profesional y económica en la sociedad. Eso hace que las pacientes retrasen su maternidad después de los 30 o 40 años y tomen anticonceptivos orales durante un lapso de cinco años continuos. Aquellas que, tras la menopausia, recibieron terapia de trasplante hormonal, también están asociadas con el cáncer de mama. Otro factor de riesgo es que no amamanten y que tengan un consumo alto de alcohol.

¿Qué ocurre en el cuerpo de aquellas mujeres cuando tienen cáncer y, tras sus tratamientos, quieren quedar embarazadas?

— Si te embarazas después de tu tratamiento, no te hace más susceptible de que regrese tu cáncer de mama ni que te vaya peor. Tratamos de recomendarles a las pacientes que dejen pasar de dos a tres años para tomar esa decisión.

¿Cuáles son los tratamientos indicados para las personas diagnosticadas con esta enfermedad y que buscan embarazarse?

— Cuando la paciente desea tener un hijo se debe evaluar su fertilidad, e incluso antes de iniciar su tratamiento porque a partir de eso se pueden idear diferentes estrategias y recomendaciones de acuerdo a su caso. Por ejemplo, pueden congelar sus óvulos y el tejido ovárico a fin de que esta paciente tenga los elementos necesarios para que, después de la quimioterapia, pueda tener un embarazo.

En términos generales, una vez que le damos quimioterapia a una paciente, le podemos otorgar un medicamento que actúa “congelando” la función hormonal de las pacientes y protege en cierta medida los ovarios. Esta protección, sumada al tratamiento de fertilidad dado por un especialista, hace que tengamos mayor éxito en el embarazo posterior a la quimioterapia.

¿A qué otras situaciones se enfrentan las mujeres que buscan tener un hijo tras padecer cáncer?

— En términos generales, sea la edad que sea, una paciente debe ser tratada de la manera más integral posible para que vuelva a ser parte de la sociedad, de sus deberes como mamá, como esposa, y que vuelva a jugar su rol profesional y [reproductivo] sin ninguna complicación.

¿Cuál consideras que es el principal obstáculo para que las pacientes puedan rehacer su vida?

— Principalmente el miedo y la desinformación.

Síguenos en Google News:Google News

Lo Último