La leche materna es fundamental y la recomendación principal en la que coincide en mundo de la medicina es que los bebés la consuman desde su primer día de vida para que puedan obtener grandes beneficios para salud y comience a desarrollarse el fortalecimiento de su cuerpo.
Sin embargo, una nueva investigación llevada a cabo por por científicos de la Facultad de Medicina de Penn State, Pensilvania, Estados Unidos, confirmó que incluir pescado en la dieta de los bebés de seis a 12 meses puede ayudar a evitar que sufran retrasos en su desarrollo neurológico.
Investigación
Terrah Keck-Kester, profesor asistente de pediatría en Penn State y autor principal del trabajo científico, explicó que “si bien algunas condiciones del desarrollo neurológico están relacionadas con la genética, la evidencia emergente sugiere que los factores ambientales y los determinantes sociales de la salud pueden interactuar con los genes para influir en el desarrollo neurológico. Nuestros hallazgos sugieren que la dieta, en particular el consumo de pescado, puede ser un factor que podría influir sobre los resultados del desarrollo neurológico”.
Se evaluaron la nutrición de 142 bebés a los 6 y 12 meses de edad utilizando la Encuesta de Prácticas de Alimentación Infantil II, un cuestionario estandarizado creado por la Administración de Alimentos y Medicamentos y los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades.
Asímismo, se recogieron muestras de saliva de los bebés a los seis meses y midieron los niveles de actividad de diferentes bacterias dentro de las muestras.
“Elegimos la saliva por su fácil acceso en las visitas de control infantil, su proximidad al cerebro en desarrollo y porque la boca representa uno de los primeros sitios de contacto microbiano para los bebés que exploran su mundo físico”, explicó Steven Hicks, profesor asociado de Pediatría en Penn State y uno de los autores.