La pirotecnia es una de las formas más comunes de celebrar la temporada navideña en el archipiélago, sin embargo, para las personas diagnosticadas con trastorno de estrés post traumáticos (TEPT, por sus siglas en inglés) estas fechas pueden resultar abrumadoras.
Según Anette Quiñones Miranda, presidenta del Colegio de Profesionales de Terapia Ocupacional de Puerto Rico (CPTOPR), los ruidos fuertes y estallidos que generan los fuegos artificiales pueden aumentar el estrés, ansiedad y provocar miedos que afectan la salud y estabilidad de los pacientes.
“En el caso de las personas con TEPT, los recuerdos sensoriales como los sonidos o los olores pueden evocar recuerdos de trauma y causar que surjan síntomas en ciertos momentos. Por ejemplo, algunos veteranos de guerra pueden sentir pánico extremo cuando se encienden los fuegos artificiales porque les puede traer recuerdos de experiencias pasadas que alteran o afectan su estabilidad. En respuesta a esto, las personas con TEPT pueden aislarse aún más para evitar hallarse en un ambiente que está fuera de su control, así como sentir temor, ansiedad, tristeza o irritabilidad”, explicó la terapeuta ocupacional.
La pirotecnia incluye una gama de artículos como petardos, bengalas, cohetes, fuegos artificiales y hasta cuartos de dinamita.
“Al ser de fácil acceso, puede ser común que en un vecindario pueda haber muchas familias con su posesión. El uso de la pirotecnia en las celebraciones como, Despedida de Año, produce un exceso de ruido, humo y olor a pólvora que afecta a las personas, los animales y el ambiente en general. También, la exposición al humo puede afectar el sistema respiratorio y comprometer la salud, especialmente aquellos que padecen enfermedades respiratorias, asma, diabetes y enfermedad cardiaca. En aquellas personas que han perdido la capacidad auditiva, los sonidos estruendosos pueden afectar el oído y provocar la perdida de balance, además de tinitus o aumentar la pérdida auditiva”, abundó la experta.
Ante esto, Quiñones Miranda enumeró varias recomendaciones para mitigar los efectos de la pirotecnia. Dijo que los familiares de las personas con TEPT pueden recurrir a identificar una habitación de la casa donde se escuche el ruido con menor intensidad. Igualmente, recomendó utilizar tapones o auriculares que bloquean el sonido.
“Para mitigar estos efectos es aconsejable que se hable con la persona anticipando lo que sucederá en las fiestas. Es importante mostrar compasión y comprensión, no se debe obligar a la persona a tomar parte en situaciones en las que pueda sentirse a disgusto y preguntarle si se siente incómoda”, recalcó.
De la misma forma, detalló que se debe considerar el uso de otros artículos en sustitución de la pirotecnia para que las festividades como adornos fluorescentes, pulseras, collares, globos, serpentinas, confeti y luces led en colores.
“En estos días de compartir en familia todos tienen derecho a celebrar. Si tiene un vecino o familiar enfermo, anciano o con alguna necesidad especial evite la pirotecnia. Se debe conocer y comprender los efectos nocivos que causa este pasatiempo que además es muy peligroso”, finalizó.
De acuerdo con el portal de la American Psychiatric Association, el TEPT es una condición mental que puede ocurrir en personas que experimentaron un evento traumático, un hecho aterrador, impactante, o peligroso como amenazas de muerte, lesiones o violencia sexual.
Otros ejemplos de exposición a eventos traumáticos incluyen desastres naturales, accidentes graves, actos terroristas, guerras y combates, violación y agresión sexual, trauma histórico, violencia de pareja e intimidación.