Recientemente compartí con un cliente amigo, y con personal de su nueva agencia de publicidad.
La primera pregunta que le disparó mi amigo a su nueva agencia fue: ¿Por qué necesito hacer publicidad digital y tradicional? Pensé que el equipo de la agencia se la iba a batear hasta Plutón. Pero no fue así.
La reacción inicial fue de sorpresa y confusión. Cómo es posible que alguien haga este tipo de pregunta. Se supone que para todos la contestación es evidente. De más está decir que, entre titubeos y contradicciones, todos trataron de improvisar una explicación que no fue consistente, satisfactoria o contundente. La reacción del cliente fue comentarle lo siguiente: “Ya empezamos mal”.
Confieso que esa experiencia me persiguió por varios días. Pero luego de mucha reflexión, reconocí el valor de la pregunta. También, comprendí la reacción del equipo de la agencia.
A veces en mercadeo realizamos nuestras actividades por uso y costumbre. Lo hago de esta manera, porque lo aprendí de esta manera, lo he hecho siempre de esta forma y es como todos en la industria lo hacen. En muchas ocasiones asumimos que el cliente entiende el por qué de lo que hacemos y la terminología que usamos, pero ésta no es su realidad.
El cliente de hoy necesita que lo eduquemos en el proceso.
Vivimos en un tiempo en el que estamos coexistiendo cinco generaciones diferentes. Cada una con gustos y preferencias diferentes. Todas tiene una afinidad por medios diferentes.
Si como profesional, logras crear para tu cliente la combinación perfecta en la utilización de medios, canales digitales y tradicionales; tendrás un alcance y una penetración optimizada. Este es el imperativo estratégico que todos buscamos. Concentrándote en una sola categoría, digital o tradicional de medios, sería un objetivo difícil de lograr.
La estrategia que consistentemente está demostrando que da los mejores resultados es la omnicanalidad. Esta es una estrategia de mercadeo y comunicaciones que requiere la utilización, de una combinación bien pensada de canales digitales y tradicionales. Esto se hace para lograr el máximo alcance posible. Al final del día lo que buscamos es que nuestro mensaje, y llamada a tomar acción llegue a nuestro cliente potencial y se materialice una transacción de venta.
Éxitos