Cuando faltan pocas horas para celebrar mundialmente este lunes una nueva versión del “Día de los enamorados”, que alrededor del mundo se vincula al amor de pareja, en Estados Unidos un padre dio muestras que ese vínculo sentimental va más allá gracias a un tatuaje que se hizo en el pecho con la misma marca de la cicatriz que tiene su hija de 4 años, quien desde su nacimiento padece de un defecto cardiaco congénito crítico.
Matt Backe, un norteamericano oriundo de Crystal Lake, Illinois, es el padre que causó revuelo en su país con un gesto de profundo amor hacia su hija, Everly, quien a sus cuatro años ya se ha sometido a tres cirugías a corazón abierto.
Es por ello que el programa “Good Morning America” quiso dar a conocer el emotivo caso, del que no sólo Matt se ha hecho partícipe, sino que su esposa e hijo.
Gesto familiar
Según relató la madre de Everly en el espacio noticioso, la idea de su marido surgió tras percatarse que la cicatriz de su hija “tiene la forma de una cremallera (cierre)” y en ella, cada vez que debe realizarse alguna cirugía, se abre la cavidad para intervenir su problema cardiaco.
Por ello es que una vez que la menor empezó a tener conciencia del motivo de su cicatriz, fue que su padre pensó la manera en hacer de esa cicatriz un símbolo de cercanía y normalidad en su hija. Ahí surgió la idea de realizarse el tatuaje, para ser el “compañero de creemallera” de Everly.
“Escuché a Evie mencionar lo de la cremallera, simplemente haciendo más preguntas de lo habitual”, contó Matt al programa, donde señaló que “pensé que si podía conseguir algo que fuera una réplica, podríamos ser amigos de cremallera y ella no tendría esa sensación de estar sola”.
El tatuaje se lo realizó a mediados de enero de este año, gracias al trabajo de un tatuador que pudo recrear exactamente la cicatriz con una foto de Everly, y tras llegar a su casa con dicha imagen tatuada en su pecho, la reacción de su hija fue casi inmediata.
“Él (Matt) no quería que estuviera sola. Quería ser especial como yo”, dijo la menor, quien en reiteradas ocasiones señaló el tatuaje de su padre y el suyo, dando cuenta de las similitudes de ambas marcas.
El gesto de Matt motivó al resto del grupo familiar, donde el hermano mayor de la niña, Jack, de 10 años, ya les dijo a sus padres que cuando cumpla 18 años “quiere hacerse el mismo tatuaje” de su papá; mientras que la mamá de Everly, Lauren Backe, se inspiró en el gesto de su marido para hacerse su primer tatuaje: una línea de un electrocardiograma, que muestra el ritmo cardiaco de la menor, con las iniciales de sus dos hijos, Kack y Everly.
“Muchas personas (con defectos cardíacos congénitos) se acercaron y dijeron: ‘Tenía una cicatriz mientras crecía y solía cruzar los brazos cuando estaba en la piscina porque estaba acomplejado por eso. Realmente podría relacionarme con esto’ (...) Honestamente, nos ha impresionado toda la gente que se acercó y todo el apoyo que nos dieron”, fue la reflexión final de Lauren, quien publicó las imágenes de los tatuajes en homenaje a su hija por Facebook, red social desde la cual su gesto se hizo viral.