El Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados (ACNUR) ha elevado a más de 500.000 los refugiados que han escapado de Ucrania desde la ofensiva militar ordenada por Rusia el pasado jueves, que ha desatado un éxodo sin precedentes en la zona.
Moldavia, Rumanía, Hungría, Eslovaquia y Polonia han recibido en estos últimos días a miles de personas que huyen del conflicto. Sólo a territorio polaco han llegado ya unos 250.000 refugiados, según las cifras de las autoridades locales recogidas por la agencia PAP.
ACNUR, que suele ir por detrás en sus balances, ha estimado por boca de su principal responsable, Filippo Grandi, que en total ya suman más de 500.000. La previsión de todas las agencias de la ONU y de las ONG es que la cifra siga subiendo conforme pasen las horas, en vista de que persisten los enfrentamientos.
La Alta Comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, ha cifrado en más de cien los civiles fallecidos víctimas de la guerra y ha señalado que «millones de civiles, incluidos ancianos y personas vulnerables, se ven obligados a refugiarse en distintos lugares, como estaciones subterráneas, para escapar de las explosiones».