Paralelamente a la eliminación del mandato de uso de mascarillas en la mayoría de los espacios que reciben público, el gobierno anunció hoy que los estudiantes podrán asistir presencialmente a las escuelas públicas y privadas independientemente de su estatus de vacunación contra COVID-19.
Pese a la flexibilización general, los planteles sí continuarán operando bajo ciertos requisitos que serán enumerados mañana en una orden administrativa del secretario de Salud, Carlos Mellado.
Hoy, Mellado adelantó que se “inclina” por continuar exigiendo el uso de mascarillas a estudiantes y docentes en aquellos salones que carezcan buena circulación de aire, al tiempo que habría mayor flexibilidad en las aulas que cuenten con ventilación cruzada o sistemas de aire acondicionado que propicien la circulación.
En la rueda de prensa, en la que estuvo el gobernador Pedro Pierluisi, se informó que, en el sistema público de enseñanza, hay unos 12,867 estudiantes que no han recibido tan siquiera la primera dosis de la vacuna, lo que constituye alrededor de un 5% de la matrícula total.
Dentro de ese grupo, unos 6,000 cuentan con exenciones religiosas, y otros 1,000, una exención por razones médicas. El resto no se habría vacunado por otros motivos y, por lo tanto, se encontraba impedido de acudir a los planteles bajo la orden ejecutiva todavía vigente.
Las nuevas directrices gubernamentales entrarán en vigor desde este jueves.
Hasta el momento, los estudiantes de escuela elemental –el segmento de cinco a 11 años de edad– representan el grupo más rezagado entre la población apta para vacunación.
Al tomar en cuenta los alumnos de escuelas públicas y privadas dentro de ese segmento –una población de 227,000 en todo Puerto Rico, solo el 70% había recibido la primera dosis de la vacuna y el 58%, ambas.
Según Pierluisi, la dosis de refuerzo ya se le administró al 61% de los estudiantes de escuelas públicas.
“Hay diferentes escenarios donde el CDC (Centros para el Control y Prevención de Enfermedades) establece utilicen mascarillas o no. Eso depende de la ventilación. Obviamente no todos los escenarios de las escuelas y universidades tienen esa disposición. Por lo tanto, nosotros vamos a recomendar la utilización de mascarillas en aquellos lugares donde no tengan aire acondicionado que puedan abrir esa escotilla para que el aire fluya. En lugares abiertos no es necesario la utilización de mascarilla”, recalcó Mellado.
“El Departamento de Salud ahora va a jugar un rol de recomendación. Obviamente, hay escuelas y hay escuelas. En la orden de mañana vamos a aclarar qué tipo de escuelas pueden hacerlo (obviar el uso de mascarillas) y qué escuelas no pueden hacerlo”, respondió Mellado al preguntársele si la orden administrativa establecería mandatos o recomendaciones con relación al uso de cubrebocas.
El secretario, asimismo, indicó que en el decreto administrativo se establecerán aquellos protocolos que deban continuar implementándose en los planteles.
“Ya las escuelas llevan ese protocolo al dedillo, tienen enfermeras, personal de salud. Las escuelas son el sitio donde mejor están preparados. Tenemos una gran cantidad de niños vacunados, por lo que si tuviesen COVID pasaría lo que pasó ahora (ante el embate de la variante Ómicron), que no tuvimos mortalidad en ese renglón. Tuvimos hospitalización pero no mortalidad, y las hospitalizaciones fueron mucho más bajas”, subrayó el titular de Salud.
Bajo la orden ejecutiva que quedaría derogada a partir del jueves, se exigía que los estudiantes mayores de 12 años hubieran recibido la dosis de refuerzo de la vacuna, al tiempo que recientemente se había autorizado a que los alumnos entre cinco y 11 años acudieran a las escuelas con solo una dosis, pero exigiendo que se diera seguimiento para que completaran la serie inicial.
Otros lugares donde se conservará el requisito de uso de mascarillas incluyen los hospitales y otros centros de salud, farmacias y hogares de cuido prolongado para personas mayores.
“El Departamento de Salud podrá exigir el uso de mascarillas en otros escenarios según lo estime necesario para evitar contagios”, puntualizó Pierluisi, al aclarar que los patronos en establecimientos privados o públicos tendrán la libertad de imponer restricciones adicionales.
En términos generales, los mandatos de vacunación quedarán derogados, aunque los organizadores de eventos que aglomeren sobre 1,000 personas deberán seguir protocolos establecidos por Salud, incluyendo certificado de vacunación o resultado de prueba negativa al virus.
Hoy, el Departamento de Salud informó que la tasa de positividad de COVID-19 se encuentra en un 4.3%, mientras que las hospitalizaciones ascendían a 65, incluyendo ocho casos pediátricos.