Veteranos residentes en Puerto Rico llegaron hasta el Congreso de los Estados Unidos para denunciar el déficit de derechos civiles por los que lucharon en los distintos conflictos armados, pero se les niega por residir en un territorio.
Los congresistas Jenniffer González Colón, Darren Soto, Mike Waltz, Rubén Gallego y Amata Radewagen, acompañaron a los cerca 30 veteranos, liderados por el Brigadier General retirado del Ejército, Víctor Pérez, en una conferencia de prensa frente al Capitolio federal, donde hicieron la denuncia e informaron sobre las reuniones con otros congresistas, sostenidas en la semana.
En ella estuvieron el representante José Aponte y la shadow delegate María “Mayita” Meléndez.
Los veteranos se reunieron con congresistas de ambos partidos políticos nacionales, enfocados en miembros de los comités de las Fuerzas Armadas, Asuntos del Veterano y Recursos Naturales entre otros. Le expusieron las desigualdades en derechos, representación, acceso a servicios de salud y beneficios que enfrentan una vez regresan al territorio.
“Esta es la cuarta gran delegación de ciudadanos que viene a la capital federal para impulsar que se respete el reclamo de Estadidad para Puerto Rico: grupo de mujeres, jóvenes, el extended shadow delegation y ahora veteranos. Y este es el grupo al que la desigualdad toca más dolorosamente porque son los que precisamente han luchado por los derechos de todos los ciudadanos americanos, sin embargo, una vez regresan a su hogar, no pueden disfrutar plenamente de los mismos”, dijo la comisionada residente.
González Colón indicó que “sobre 1,900 ciudadanos americanos nacidos en Puerto Rico han defendido la democracia con sus vidas; desde septiembre 11 del 2001, nuestros militares han sido movilizados en 16,500 ocasiones, más que otros 34 estados; el 52% de las personas en Puerto Rico han servido en las Fuerzas Armadas o tiene un familiar que sirvió. Los puertorriqueños estamos orgullosos de nuestra trayectoria defendiendo a la nación y la misma ha sido reconocida con 9 Medallas de Honor, la Medalla de Oro del Congreso, entre otras condecoraciones nacionales e internacionales, pero es totalmente injusto que se les despoje de los derechos que nos han asegurado al regresar a su hogar bajo un estatus político discriminatorio”. “Con más de 90,000 veteranos que llaman hogar a Puerto Rico, es crucial para nuestra nación garantizar que reciban el mismo trato que sus contrapartes en el continente.
Como resultado del estado territorial de la isla, existen oportunidades limitadas de oportunidad económica, seguridad de salud, mejoras en la calidad de vida y más. Por su sacrificio, debemos luchar para que tengan acceso a los beneficios que legítimamente se han ganado.
“Estoy comprometido a trabajar en el Congreso para encontrar soluciones que mantengan los mejores intereses de los veteranos puertorriqueños a la vanguardia”, expresó el congresista Darren Soto.
“Con una de las tasas de participación militar más grande en la nación, decenas de miles de puertorriqueños están activos sirviendo a nuestra nación y sobre 90,000 veteranos americanos llaman a Puerto Rico su hogar”, dijo el congresista Mike Waltz. “Así como sus contrapartes en los estados, estos valientes hombres y mujeres lucharon bajo nuestra bandera, nuestro país y por nuestras libertades. Pero ahora, estos hombres y mujeres valientes están siendo tratados de manera desigual bajo las leyes federales. Es por eso por lo que me enorgullezco de estar al lado de la congresista González Colón y el pueblo de Puerto Rico en apoyo a la igualdad en el trato y beneficios para el personal activo y veteranos puertorriqueños”, continuó.
“Al igual que Puerto Rico, represento un distrito electoral en Samoa Americana que incluye a muchos veteranos y familias de militares, y sé que sus corazones están llenos de patriotismo por los Estados Unidos”, dijo la congresista Aumua Amata. “La nación se compromete de por vida con aquellos que sirven, y todos ellos merecen compartir plenamente ese compromiso nacional. Gracias, especialmente a la congresista González Colón, por asegurar que estos asuntos no puedan ser olvidados”, indicó.
El General de Brigada del Ejército (retirado) Víctor Pérez dijo: “para los veteranos de Puerto Rico y los que hemos servido, no ha habido mayor honor, mayor privilegio en nuestra vida de haber, precisamente, defendido la democracia, justicia y libertad a todos los sitios que nosotros tuvimos que ir; como la Primera y Segunda Guerra Mundial, Corea, Vietnam y en los tiempos modernos, la guerra contra el terrorismo sirviendo a nuestra nación. Lo hicimos y lo volveríamos hacer todas las veces que nosotros lo tengamos que hacer porque lo hacemos de todo corazón por nuestra nación de la que nosotros somos parte. Nosotros somos ciudadanos americanos, pero increíblemente nosotros vamos, hacemos todo eso, regresamos a nuestro Puerto Rico y no tenemos la igualdad que tienen todos los demás que sirven a la nación y regresan a sus estados como votar por el presidente y votar por sus senadores y congresistas. Nosotros no podemos votar por los que deciden exactamente cuando y donde nosotros tenemos que ir a combatir y a dar nuestra sangre, mientras nuestra familia se sacrifica, mientras nosotros estamos en tierras lejanas y de nuevo, regresamos y no tenemos la igualdad por la cual nosotros fuimos a pelear a todos estos sitios donde nosotros hemos peleado”.
El estado político actual de Puerto Rico como territorio de los Estados Unidos, niega a los veteranos la representación en el Senado de los Estados Unidos y la representación proporcional en la Cámara de Representantes.
Bajo este estatus territorial, Puerto Rico está sujeto a las leyes federales, pero el Congreso puede y, a menudo, trata a Puerto Rico de manera diferente, en formas que son perjudiciales para los veteranos en términos de oportunidades económicas, salud, seguridad y calidad de vida.
Como ejemplo, los veteranos jubilados no pueden participar en TRICARE Prime. Esto aumenta los gastos de bolsillo y dificulta la coordinación de la atención.