Tras la masacre que dejó cinco hombres fallecidos anoche en el residencial Villa Esperanza de Cupey, el gobernador Pedro Pierluisi no anticipó mayores ajustes a las políticas para combatir el crimen.
En una conferencia de prensa, el primer ejecutivo destacó que el complejo de vivienda pública se ha caracterizado por su baja incidencia criminal y que las labores de patrullaje preventivo estaban ocurriendo en el área previo a la matanza.
¿La masacre cambia en algo lo que se ha estado haciendo?, se le preguntó al mandatario.
“No, es que constantemente estamos en comunicación desde La Fortaleza con el comisionado de la Policía (Antonio López Figueroa), el secretario de Seguridad Pública (Alexis Torres). En ese residencial en particular no había habido incidentes de violencia hace bastante tiempo. El patrullaje preventivo se estaba dando en el área, pero ocurrió lo que sucedió, que es de por todos conocidos y bien lamentable. Ocurre dentro del propio residencial y, obviamente, por la información que tenemos, está atado el asunto a narcotráfico”, expresó el primer ejecutivo.
Aunque no mencionó que, en este momento, existan planes de realizar un operativo similar, el gobernador aludió a la ocupación que, desde la semana pasada, mantiene la Policía en la comunidad de la barriada Morales, en Caguas, tras una serie de balaceras ocurridas en las vías públicas de ese municipio.
“Sigue siendo una tragedia porque no queremos asesinatos, pero está atado al narcotráfico y específicamente a la operación de un punto en el residencial. La gran mayoría de los asesinatos que estamos viendo están atados al narcotráfico, así que seguimos combatiéndolo utilizando la inteligencia que recopilan las diferentes comandancias, coordinando el patrullaje preventivo no solo a nivel de la Policía, sino también con las policías municipales. La estrategia sigue en curso”, sostuvo Pierluisi.
“Se están haciendo operativos comunitarios en áreas impactadas o áreas en las que hay ese tipo de disfuncionalidad. Por ejemplo, la barriada Morales ya está desplegada la fuerza de la policía para atender este asunto de la violencia desde un punto de vista diferente, desde un punto de vista más preventivo. Así que seguiremos a la carga”, subrayó el gobernador.
En la mañana de hoy, la Policía identificó a los cinco hombres asesinados en Villa Esperanza: Alexis Rafael Peralta Matos, de 33 años, Janiel Morales Pérez, de 34 años, Jorge Luis Sánchez Límber, de 39 años, Jonathan Burgos Marrero, de 40 años, y Janiel Oliver Ramos, 48 de años. La masacre fue la segunda del 2022.
Al tomar en consideración la masacre, en lo que va de año la Policía ha registrado unos 237 asesinatos, dos más de los que se contabilizaron hasta la misma fecha en 2021.
“Ahora mismo el nivel de asesinatos está más o menos igual, básicamente igual que el año pasado. Yo quisiera que bajen. Todos queremos que bajen los asesinatos, así que seguiremos en contacto con la Policía a diario para asegurarnos de que así sea”, planteó Pierluisi.
En el caso de los delitos Tipo I, que además de homicidios incluyen robos, violaciones y agresiones agravadas, así como el hurto de propiedad, se habían registrado 6,627 hasta finales de abril, un incremento de 579, o casi 10%, respecto a la misma fecha del 2021.
