El Comité Ejecutivo del Colegio de Peritos Electricistas de Puerto Rico (CPEPR), encabezado por su presidenta, Frances Berríos Meléndez, solicitó el viernes, al secretario del Departamento del Trabajo y Recursos Humanos, Gabriel Maldonado González, una revisión a la clasificación laboral de los peritos electricistas y la posibilidad de elevarlos a un nivel intermedio profesional técnico dentro de la escala vigente.
“Le estamos solicitando que revise las clasificaciones laborales y que evalúe la creación de un nivel laboral intermedio, que podríamos llamar profesional técnico. Ese escalón se colocaría entre el obrero, que no necesita preparación académica y el profesional que requiere un bachillerato. El perito no pertenece a ninguno de los dos grupos, somos técnicos altamente especializados y como tal, no debemos estar trabajando por un salario mínimo federal. Para evitar el éxodo de trabajadores y mantener la fuerza laboral que requiere la isla, debemos hacer lo justo. Esta revisión además beneficiaría a otros técnicos como los de refrigeración, mecánicos y plomeros que están en la misma situación”, dijo la presidenta del CPEPR en declaraciones escritas.
En reunión con Maldonado González, la presidenta del (CPEPR), resaltó que a pesar de toda la preparación académica y de los riesgos a los que se enfrenta en el ejercicio de su profesión, el perito electricista está clasificado como obrero, igual que otros trabajadores sin preparación académica o técnica y cuyo sueldo, por decreto mandatorio, no va más allá del mínimo federal.
Este reclamo del CPEPR ocurre en momentos en que el país enfrenta un éxodo de trabajadores en medio de una transformación eléctrica con una inversión multimillonaria en proyectos de reconstrucción del sistema de electricidad para los próximos 10 años.
Un perito electricista tiene que graduarse de una institución acreditada por el Consejo de Educación Superior con 1,000 horas mínimo de estudio, una reválida para la licencia de ayudante y luego de un año, puede convertirse en perito electricista con otra reválida teórica y una reválida adicional práctica. Para estar en cumplimiento, la Ley 131 también le requiere su colegiación y mantener sus capacitaciones anuales al día para la Junta Examinadora de Peritos Electricistas. Esto contrasta altamente con el obrero que no requiere una educación profesional para las labores que realiza.
La propuesta del Comité Ejecutivo compuesto además por el secretario de la organización Justiniano García y el tesorero Alberto Medina, también propicia el cumplimiento de municipios y agencias gubernamentales en la contratación de personal. Hoy estos patronos ofrecen el mínimo salarial y eso le dificulta encontrar candidatos para llenar las plazas que por ley tienen que estar cubiertas por peritos electricistas.
“Tenemos municipios y agencias de gobierno como la AAA que aunque la ley le requiere que tengan peritos electricistas, se le hace difícil la contratación debido a que los compañeros por el sueldo que le ofrecen no están disponibles y muchos se van del país en búsqueda de mejores condiciones laborales. Eso tenemos que resolverlo. El país no puede quedarse sin la fuerza laboral en este momento”, recalcó Berríos Meléndez.
La presidenta del (CPEPR) vio buen ambiente para estos cambios que estima son completamente necesarios.
“Estamos muy complacidos con la apertura del secretario. Él (Maldonado González), se comprometió a evaluar la inquietud con su equipo de trabajo y luego tendremos otra reunión para seguir conversando del tema, pero ciertamente entendió nuestro planteamiento”, expresó Berríos Meléndez.