Un contrato a 30 años para un proyecto en 144 cuerdas ubicadas en terrenos de la playa Los Machos en Ceiba es el eje de una nueva controversia por el trámite expedito con una empresa de reciente creación por parte del exsecretario de Estado, Luis Rivera Marín.
Ángelo Cruz, exalcalde de Ceiba, denunció a Metro la transacción tanto por ser desventajosa para el municipio como por las interrogantes de permisología e impacto ambiental del proyecto. El contrato está registrado en la Oficina del Contralor de Puerto Rico (OCPR) entre la administración del actual alcalde Samuel “Sammy” Rivera Báez y la empresa Guayacán Guest Services, LLC., para el arrendamiento de 144 cuerdas de terreno en esa zona de playa.
La información en el banco de datos de la OCPR corroboran que el contrato número 2023-000025 fue otorgado el pasado 15 de julio para la “construcción y reparación de estructuras” en esa zona, no obstante la cuantía es de cero. Cruz explicó que esto se debe a que el Servicio federal de Parques Nacionales (NPS, en inglés) tiene injerencia sobre las cuerdas de terreno al ser una titularidad compartida entre la agencia federal y el municipio de Ceiba.
De hecho, según indica el contrato en poder de Metro – firmado por Rivera Marín como presidente de Guayacán y Rivera Báez como alcalde de Ceiba – el monto por concepto de renta se establecerá de forma ascendente por los primeros años del contrato, estipulado por un periodo de 30 años. Los dos primeros años del acuerdo, Guayacán Guest Services deberá pagar $1,000 mensuales como canon de arrendamiento de las 144 cuerdas, razón de unos $6.94 por cuerda de terreno. El tercer año, indica el acuerdo contractual, la cantidad aumentará a $3,000 mensuales y del cuarto año en adelante, a razón de $5,000 mensuales. Además, el contrato estipula una partida del 2 por ciento para las arcas del ayuntamiento de las ganancias totales en las operaciones del arrendatario.
El exalcalde criticó, sin embargo, la manera “desorganizada” del proceso realizado por el municipio al no seguir los pasos requeridos para someter un proyecto de esta índole.
“Todavía a nivel federal no lo han aprobado y por eso ese contrato todavía no es válido. Ellos hicieron todo al revés, los pasos correctos para hacer esto son presentarle el proyecto al NPS, que ellos se lo aprobaran, luego tenían que ir a la Legislatura para pedir permiso para que les aprobaran tirar la Solicitud de Propuesta (RFP, en inglés) y entonces otorgar el proyecto”, dijo.
Según el acuerdo contractual asumido por el Municipio de Ceiba y la empresa Guayacán Guest Services, el proyecto estaría dividido en tres fases principales. La primera comprendería de la construcción de un estacionamiento, un punto de control de seguridad, regaderas e instalaciones sanitarias y cercado del perímetro.
La segunda fase consiste en la construcción de las instalaciones de alojamiento y el anfiteatro, y la tercera, la construcción de una instalación para almacenaje de botes.
No obstante, al preguntársele al alcalde sobre si el acceso a la playa pública sería restringido, este lo negó rotundamente y aseguró que como “una persona que cuida la naturaleza”, está comprometido con la integridad de esa zona marítimo-terrestre.
“Yo me voy a asegurar de que esa playa continúe siendo de nosotros, la playa seguirá siendo pública”, indicó categóricamente. “Allí esas 144 cuerdas tienen unas restricciones federales por NPS en la cual no se permite ni tirar asfalto, ni tirar cemento, todo lo que se va a hacer allí es un parque recreativo turístico”, aseguró el alcalde Rivera Báez en entrevista telefónica con Metro.
Según el alcalde el arrendatario privado hará una inversión inicial de unos $3 millones en mejoras a los predios.
¿Mal negocio?
Al preguntarle al alcalde si consideraba ese un buen negocio para el municipio, este aseguró que no se trata de la cantidad de dinero recaudada por parte del gobierno, sino el potencial de desarrollo económico que tiene el proyecto.
“Las 144 cuerdas tienen muchas restricciones, la inversión se tardará meses largos en poder encaminar las mejoras. Todo lo que se haga tiene que ser a nivel turístico, así que le dimos la oportunidad a los inversionistas, de unos meses, unos años, para que ellos puedan implementar su proyecto”, dijo Rivera Báez.
“Aquí lo más importante es que lo estamos rentando por equis cantidad, o un porciento de ganancia por el fruto de lo que se genera allí. Aquí estamos enfocados en crear tráfico para el pueblo”, añadió.
Déjà vu para el exalcalde
Para el exalcalde Cruz, el contrato representa un deja vú de un plan de desarrollo de esas mismas 144 cuerdas que el propio Rivera Marín le presentó en 2014. Propuesta que el entonces alcalde no favoreció.
“Para el 2014 Luis Rivera Marín llegó a mi oficina con un plan de desarrollo para esas mismas 144 cuerdas. Nos explicó en aquel entonces que iba a hacer una marina, un desarrollo de área de acampar, bueno, básicamente me imagino que es lo mismo que le vendió a este alcalde” aseguró Cruz. “Al final del día, yo le cuestioné el por qué le iba a alquilar eso ahí si el municipio apenas ganaba con ese proyecto. Que toda la ganancia era para ellos. Y como no era beneficioso para el pueblo, le dije que no”.
El exalcalde señaló como hecho curioso que el 18 de marzo de 2022, el alcalde Rivera Báez publicó el RFP para el desarrollo de esas 144 cuerdas y solo 10 días después – el 28 de marzo – se incorporó la empresa Guayacán Guest Services, LLC., que, según el propio contrato, es presidida por el exsecretario de Estado bajo la administración del renunciante gobernador, Ricardo Rosselló. De hecho, Rivera Marín también renunció poco antes que Rosselló a su cargo al salir a la luz pública un infame chat del cual el entonces secretario de Estado formaba parte.
“(El alcalde) radica un RFP el 18 de marzo y 10 días después, Luis Rivera Marín y su socio Luis Alberto Rubí, inscriben una empresa con el nombre de Guayacán Guest Services, el 28 de marzo. Tiran la subasta, ¿y adivina quién se la ganó?”, cuestionó el exalcalde con ironía.
“Hicieron la pantalla de tirar el proyecto a través de un RFP, pero le dieron el contrato a Guayacán como ya habían acordado, pero nosotros nos hemos mantenido bien pendientes de todo lo que están haciendo y seguiremos fiscalizando”, añadió Cruz.
El blog Prensa Sin Censura reveló la controversia ayer y calificó en su titulación la transacción como un regalo. También reseñó que según un reportaje del Centro de Periodismo Investigativo, Luis Alberto Rubí —el socio de Rivera Marín en esta nueva empresa— figuraba entre los socios de Dos Mares Resort que se quería desarrollar en terrenos del Corredor Ecológico del Noreste entre Luquillo y Fajardo.