El presidente de la Asociación de Alcaldes, Luis Hernández Ortiz, expresó que todos los alcaldes están dispuestos a recibir ayuda humanitaria para llevarla a los mas necesitados tras el paso del huracán Fiona, especialmente en los pueblos del sur.
“Cuando yo escucho decir que no es necesaria la ayuda humanitaria o que no estamos dispuestos a recibirla, hay que tener poca sensibilidad con este país. Yo acabo de hablar con la alcaldesa de Salinas y ella está dispuesta a recibir ayuda humanitaria. Necesita ropa y artículos personales para familias que lo perdieron todo. Y eso mismo ha pasado en Ponce, en Guánica, en Adjuntas, en Villalba, en todos los pueblos. Así que sí, la Asociación de Alcaldes esta lista para recibir la ayuda humanitaria que sea necesaria desde la diáspora o de quien sea para canalizarla y llevarla a quien la necesite”, señaló el también alcalde de Villalba en conferencia de prensa.
Entre los llamados que hizo Hernández Ortiz al gobierno estatal y federal está que los $250 mil de fondos de emergencia, además de ser insuficientes, deben ser una transferencia inmediata a los municipios.
“Aquí hay municipios que lo han perdido todo, hay municipios que ya sus gastos sobrepasan esa cantidad y todos los alcaldes le pedimos al gobierno que el fondo de emergencia no tenga un tope. Son más de $500 millones para una emergencia y estamos en una emergencia. Hay que tener acceso directo a todos los recursos que sean necesarios”, dijo Hernández Ortiz.
El segundo llamado que hizo es a que LUMA autorice a la Autoridad de Energía Eléctrica (AEE) a prender las generatrices y comience a generar energía, pues la mayoría de los pueblos del suroeste aún están sin luz ni agua potable.
En lo que respecta al Departamento de Transportación y Obras Públicas (DTOP), Hernández Ortiz le exhorta a permitir que los municipios puedan asfaltar las carreteras estatales.
El alcalde Adjuntas, Hiram Soto Rivera, dijo que los daños más graves en el pueblo han sido para la agricultura, especialmente las producciones de plátanos, guineos y café. Además, aseguró tener un problema que costará millones de dólares con las carreteras estatales y que por consecuencia tiene a varias comunidades incomunicadas. Dijo que esto ocurre debido a la dejadez de la Autoridad de Carreteras y Transportación (ACT).
“Pasado este fenómeno del huracán Fiona, la prioridad debe ser en el sur, particularmente en las carreteras rurales. Ayer mi equipo de trabajo estuvo abriendo caminos, derrumbes, desprendimientos en las carreteras que son inseguras. Creo que lo que nos enseña esto es que hay que darle prioridad a lo que por mucho tiempo estuvo abandonado…La seguridad de nuestros pueblos está en riesgo”, exhorto el alcalde de Ponce, Luis Irizarry Pabón.
Hernández Ortiz aseguró que otro problema que tiene el suroeste de la Isla es que los camiones de gasolina no están llegando por lo que muchas de las gasolineras están cerradas.
Por último, mencionó que el municipio de Salinas fue el más afectado con más de dos mil familias tuvieron que ser reubicadas ya que lo perdieron todo con el paso del huracán.
El alcalde de Ponce aseguró que sus 31 barrios fueron afectados, algunos más severos que otros, y al momento se encuentran visitando y recibiendo llamadas de estas áreas para identificar las necesidades.
En cuanto al municipio de Guánica, el alcalde Ismael “Titi” Rodríguez informó que han logrado la limpieza de carreteras y tienen una buena logística de evaluación de daños. Añadió que durante el fin de semana trataron de comunicarse con LUMA y con el Departamento de Salud, pero no recibieron respuesta. En un censo que continúan haciendo por la comunidad, encontraron que hay 18 casas completamente destruidas y 58 con daños menores, además de estar sin agua y luz.
Añadió que antes de la llegada del huracán Fiona estaban a punto de empezar con proyectos de reconstrucción tanto por el huracán María como por terremotos.
“No ha llegado la ayuda del huracán María, ni de los terremotos y ahora ¿hasta cuando vamos a tener que esperar para que llegue la ayuda por el huracán Fiona?”, dijo el alcalde de Guánica.
Por su parte, el alcalde de Luquillo, Jesús Márquez Rodríguez, señaló que existe un plan para desaparecer municipios y que cada vez es más palpable la estrangulación con los municipios pequeños.
“Desde antes de María en el municipio hemos estado reclamando generadores para las bombas de agua, Luquillo parece un pueblo llano y costero, y sí lo es, pero el 80% de nuestra comunidad vive en las faldas del Yunque o sea que para que les llegue el agua necesitamos bombas eléctricas”, Márquez Rodríguez.
