Un gran jurado federal en el Distrito de Puerto Rico acusó a varias personas y una empresa que mercadeaban artefactos para supuestamente tratar enfermedades como COVID-19, Parkinson y Alzheimer.
El pasado 1 de febrero, el gran jurado emitió una acusación contra Elberto Berdut-Teruel, Wanda L. Carballo-Cabrera, María Santos-Carballo y Magnetic Healer of PR Inc. por conspiración e introducción de dispositivos adulterados y mal etiquetados con la intención de defraudar y engañar, conspiración para cometer fraude postal y alteración de un dispositivo después del envío en el comercio interestatal.
Según documentos judiciales, los acusados se enriquecieron ilegalmente y operaron la empresa Magnetic Healer of PR Inc. para vender dispositivos que contenían imanes (“imanes curativos”) que se anunciaban como efectivos en la cura, mitigación, tratamiento y prevención de enfermedades en humanos, que incluyeron COVID-19, migrañas, depresión, insomnio, enfermedad de Parkinson, enfermedad de Alzheimer, autismo y cáncer, entre otros.
La acusación formal alega que los demandados generaron ganancias de la venta ilegal de los dispositivos, que fueron adulterados y mal rotulados para los propósitos de la Ley Federal de Alimentos, Medicamentos y Cosméticos (FDCA) y busca la confiscación de una sentencia monetaria por un total de $327,047.56.
“Uno de los propósitos de la FDCA es garantizar que los dispositivos y medicamentos que se venden para prevenir, curar o tratar enfermedades sean seguros y efectivos para los usos previstos y lleven etiquetas que contengan información verdadera y precisa y que tengan instrucciones de uso adecuadas. La FDCA prohíbe, entre otras cosas, la introducción y entrega a sabiendas en el comercio interestatal de un dispositivo que esté mal etiquetado o adulterado”, se indicó en comunicado de prensa.
Se alega que los dispositivos que vendieron los demandados fueron mal etiquetados bajo la FDCA porque los demandados comercializaron y vendieron dispositivos sin notificar y obtener la aprobación necesaria de la Administración de Drogas y Alimentos de los Estados Unidos (FDA). La falta de aprobación de la FDA también hizo que los dispositivos fueran adulterados para los fines de la FDCA. Además, los dispositivos estaban mal etiquetados porque su etiquetado era falso y engañoso; el etiquetado no incluía instrucciones de uso adecuadas; y el etiquetado carecía de las advertencias adecuadas.
Según la acusación, los demandados obtuvieron piezas para los dispositivos por correo de proveedores fuera de Puerto Rico y ensamblaron los dispositivos en la isla. Promocionaron los dispositivos en las redes sociales y sitios web, incluidos www.elbertoberdut.com y www.magneticbiotherapy.com. Los demandados afirmaron falsamente que los dispositivos no requerían la aprobación de la FDA, se habían presentado para la aprobación de la FDA y estaban autorizados por la FDA, utilizando un logotipo oficial “autorizado por la FDA”. Los demandados vendieron los dispositivos a través de los mismos sitios web y en la dirección física de la empresa en San Juan, Puerto Rico.
Elberto Berdut-Teruel era el presidente, secretario, tesorero y agente residente de Magnetic Healer of PR Inc. Wanda L. Carballo-Cabrera y María Santos-Carballo eran empleadas de la empresa.
“Las empresas que venden productos médicos ponen en riesgo a sus clientes cuando tergiversan la calidad, la seguridad o la eficacia de esos productos”, dijo W. Stephen Muldrow, Fiscal de los Estados Unidos para el Distrito de Puerto Rico. “Al trabajar con la FDA y otros socios encargados de hacer cumplir la ley, nos comprometemos a responsabilizar a las personas y empresas por violar la integridad del proceso de aprobación de la FDA, lo que afecta directamente la salud y la seguridad públicas”.
Si son declarados culpables, los acusados enfrentan una pena máxima de 20 años de prisión. Un juez de un tribunal de distrito federal determinaría cualquier sentencia después de considerar las pautas de sentencia de EE. UU. y otros factores legales.
