Finalmente, tras haber decretado un receso desde el día de ayer, el jurado en el caso del productor Sixto “George” Díaz Colón lo encontró culpable de manera unánime de haber cometido extorsión, intento de extorsión y destrucción de evidencia.
El jurado compuesto por siete mujeres y cinco hombres se había retirado a deliberar luego de que tanto el ministerio y la defensa habían presentado sus argumentos finales. Para no contaminar el proceso, el juez Francisco Besosa le pidió ayer al jurado que no leyeran noticias sobre el caso, no buscaran en internet y que no escucharan radio, previo a culminar la deliberación.
PUBLICIDAD
Díaz Colón estaba acusado de extorsión, tentativa de extorsión y destrucción de evidencia en una investigación federal.
El juez Francisco Besosa informó que la lectura de sentencia está pautada para el 5 de mayo a las 9:00 de la mañana. Con este veredicto, el productor se expone a un máximo de 20 años de cárcel.
Dado a la determinación, Díaz Colón fue ingresado de manera inmediata a la cárcel hasta que se le dicte su sentencia.
A su salida del tribunal, el abogado de Díaz Colón, Rafael Castro Lang, admitió estar decepcionado ante las determinación del jurado y adelantó que tan pronto se emita la sentencia, su equipo legal estará apelándolo.
“Estoy bien decepcionado porque yo pensaba que iba a salir no culpable en todos los cargos, porque ahí no probaron los elementos del delito y obviamente esta decisión se va a apelar. Leo veo muchos errores que ocurrieron en el caso, instrucciones que no se vieron, que no dejaron pasar”, sostuvo el licenciado mientras era abordado por la prensa.
PUBLICIDAD
“Desafortunadamente, él (Díaz Colón) se siente bien decepcionado por cómo el sistema ha funcionado”, agregó.
Por su parte, el jefe del Negociado Federal de Investigaciones (FBI) en Puerto Rico, Joseph González, afirmó estar contento de la determinación y aprovechó para defender el equipo legal del caso de las expresiones de Díaz Colón, quien acusó a las autoridades federales de corrupción.
“Estoy orgulloso de mi equipo de trabajo y de los fiscales... Como el encargado de la oficina, puede ser que reciba críticas, pero cuando son nuestro personal que está día y noche en la calle, duele. Hacemos el trabajo de la manera correcta y la justicia se cumplió, como muchos de los casos que hacemos”, dijo el funcionario a su salida.
Ayer, los trabajos en la sala que preside el juez Francisco Besosa iniciaron con los argumentos del ministerio público.
“Oportunidad, codicia, extorsión y encubrimiento”, fueron las palabras con las que la fiscal Miriam Fernández inició sus argumentos finales ante el jurado compuesto por siete mujeres y cinco hombres.
La fiscal señaló que la “oportunidad” estuvo en el chat de Telegram que tenía Raúl “Raulie” Maldonado, hijo del exsecretario de Hacienda, Raúl Maldonado, quien fuera despedido por el entonces gobernador Ricardo Rosselló luego de denunciar en una entrevista radial que en el Departamento de Hacienda había una mafia institucional. Tras el despido, se le adjudica a Raulie destapar el escandaloso chat de Telegram que provocó que Rosselló renunciara a la gobernación.
Indicó que la “codicia” son los $300,000, en referencia al reclamo que habría hecho Díaz Colón a través de mensaje de texto a Anthony Maceira, exsecretario de Asuntos Públicos bajo la administración de Rosselló. Según la fiscalía, Díaz Colón le habría hecho la solicitud del dinero a Maceira para evitar que “Raulie” continuara filtrando información que perjudicara la administración de Rosselló.
En cuanto a la “extorsión”, señaló que ocurrió en los encuentros que Maceira tuvo con Díaz Colón en los restaurantes Musa e IlPostino. Fue en IlPostino, según la fiscal, que Díaz Colón mencionó en ocho ocasiones los $300,000. Y el “encubrimiento”, Fernández indicó que quedó evidenciado en la eliminación de los mensajes de Telegram.
Fernández repasó cargo por cargo y estableció cómo el ministerio público había probado los elementos del delito del caso.
Posteriormente, el licenciado Castro Lang inició su turno de argumentaciones, quien más temprano le dijo al juez que sentía mejor luego que ayer enfrentara problemas con su voz. El juez, por su parte, le comentó que le tenía algo y le entregó unas pastillas para la garganta. Le aseguró también que le daría todo el espacio que necesita.
En su turno de argumentaciones, Castro Lang dijo estar de acuerdo con la fiscal en que hay que usar el “sentido común”, palabras que utilizó Fernández para indicar que el jurado debería utilizarlo para conectar las piezas de evidencia y poder llegar a un veredicto unánime.
Utilizó el primer mensaje enviado por Díaz Colón el 20 de junio 2019 a Maceira para cuestionar el texto. “¿Dónde en este texto ustedes ven a Sixto hacer un reclamo de extorsión por $300,000? En ningún sitio”, dijo según informó Telenoticias.
“¿Dónde hay una amenaza de extorsión a Maceira? Sixto no están amenazando a Maceira. ¿Desde cuándo ayudar a un amigo es una amenaza?, sostuvo. Según el licenciado, el productor lo que hizo fue tratar de ayudar a Ricardo Rosselló Nevares y a su administración en momentos que estaba la amenaza de los chats de Telegram que desataron varias protestas y la renuncia de Rosselló.
Apuntó que la fiscalía quiere hacer ver el mensaje como uno de extorsión y no lo es. Dijo que Maceira distorsionó ese mensaje.
“Apliquen el sentido común porque les dirá que no hay amenaza o extorsión de Sixto en ese mensaje”, sostuvo.
El juez Francisco Besosa le impartió al jurado las instrucciones que seguiría para emitir un veredicto. No obstante, la defensa expresó varias objeciones a las directices.
Las instrucciones que el juez le habría impartido al jurado compuesto por seis hombres y seis mujeres son: “Más allá de toda opinión, deben actuar según la ley. No se dejen persuadir por ninguna imparcialidad, simpatía u opinión pública. Que consideren solo la evidencia presentada en el juicio. El acusado, no necesariamente, tiene que haber obtenido un bien o dinero para cometer un delito. El gobierno federal debe probar el caso más allá de duda razonable y Pueden descartar como evidencia la conversación de Maceira y Sixto en el 2019 si no es audible el sonido de la grabación”. De igual manera le explicó al jurado la definición de los cargos.
El productor radial fue acusado en enero de 2021, casi dos años después de presuntamente haber cometido los hechos que se le imputan. En específico, a Díaz Colón se le acusa de haber intentado extorsionar al renunciante gobernador Ricardo Rosselló Nevares ante a la revelación de un chat en la que participó a través de la aplicación de Telegram junto a otros funcionarios de su administración y allegados de su círculo íntimo.
La divulgación de esas conversaciones provocó masivas protestas en contra del exejecutivo que lo llevaron a convertirse en el primer gobernador electo en no terminar el cuatrienio por el que juramentó.
Durante esas manifestaciones, alegaron las autoridades federales, Díaz Colón intentó obtener dinero para evitar la filtración del chat y para mejorar la imagen de Rosselló Nevares en los medios mediante el pago a personalidades de la radio y la televisión.