Una bomba estalló al paso de un vehículo militar en el noroeste de Pakistán, matando a dos soldados que iban en él, informaron los militares paquistaníes. El Talibán paquistaní se atribuyó el hecho.
El grupo, llamado Tariki Talibán, dio una cifra más alta de víctimas, afirmando que fueron ocho los soldados fallecidos en el hecho ocurrido el sábado en la provincia Khyber Pakhtunkhwa. De inmediato no fue posible explicar la discrepancia.
El Tariki Talibán también se atribuyó un ataque con granadas contra una camioneta policial en la zona Swabi de la provincia el sábado, en que murió un policía y otros dos resultaron heridos.
Pakistán ha sufrido un aumento de los ataques desde que el grupo puso fin a una tregua con el gobierno en noviembre. A fin de contrarrestar la violencia, el gobierno anunció el viernes que en las próximas semanas lanzará un amplio operativo antiterrorista en todo el país.
El Comité de Seguridad Nacional, formado por el primer ministro y la alta plana del ejército, accedió a relanzar el operativo este mes bajo un plan de acción nacional.
El plan involucra operaciones militares y de inteligencia, penas de muerte para los guerrilleros, el establecimiento de tribunales militares especiales y el despliegue de fuerzas antisubversivas en zonas vulnerables.
Un plan parecido fue lanzado en 2014 tras una masacre escolar en Peshawar, en que el grupo rebelde mató a 140 personas, entre ellas 132 niños.
El Talibán paquistaní es un grupo separado del Talibán afgano, aunque los grupos guerrilleros paquistaníes con frecuencia tienen lazos con los que están al otro lado de la frontera.
