El secretario del Departamento de Hacienda (DH), Francisco Parés Alicea, anunció hoy los resultados de un nuevo estudio sobre la tasa de captación del Impuesto sobre Ventas y Uso (IVU) que muestra un aumento en la captación de este impuesto, que genera anualmente recauda unos $3,000 millones para el erario.
“Aquí es donde está la noticia de la década en cuanto a administración contributiva”, aseguró Parés Alicea. “El índice de captación del IVU, que representa un porcentaje importante de la base tributaria de los ingresos al Fondo General, mostró un desempeño en los últimos dos periodos fiscales que sobrepasó la tendencia, con tasas de captación total de 75 y 77 por ciento”.
“Esto representa un incremento de 19 puntos porcentuales en el 2022 versus el periodo de 2016″, añadió el funcionario.
Parés Alicea destacó que este es un gran logro de la agencia tomando en consideración las criticas que se le han hecho con anterioridad a la agencia.
El titular de Hacienda explicó además que el estudio realizado por la OAEF abarca los años fiscales de 2011 hasta el 2022, periodo en el cual se experimentaron una serie de calamidades naturales como huracanes, terremotos y una pandemia.
Sin embargo, el estudio refleja que luego de una disminución de la captación en el 2017 -año en que Puerto Rico recibió el impacto del huracán María – la tendencia del índice mostró un incremento sostenido entre los años fiscales 2019 y 2022, para alcanzar el índice de captación máximo en el 2022 cuando ascendió a 77%.
“Puerto Rico ya está muy por encima de la media de lo que es la captación del Impuesto de Valor Añadido (IVA), que tiende a tener mayor captación que el IVU, y viendo la comparación con América Latina, ellos estaban típicamente en un 56 por ciento para 2019 y ya nosotros, en 2021, estuvimos en 75 por ciento y en 2022 en un 77 por ciento”, señaló el secretario del DH.
“Con este estudio se revisa la metodología utilizada en el estudio de abril de 2016 que, a grandes rasgos, actualiza la base de ‘commodities’ o artículos de importaciones registradas, revisa los ‘ratios’ o proporciones a utilizarse para estimar la base imponible en servicios y replica una metodología similar para estimar los cambios en la base y tasa del componente de servicio del índice. Buscamos identificar los comportamientos de cumplimiento, de manera que el uso del índice, además de ser un instrumento de medición, sea uno de fiscalización”, agregó.
El secretario también explicó que la base potencial del renglón de mercancías son las importaciones registradas, cuya fuente es el comercio exterior (External Trade) del Departamento de Comercio federal.
Parés Alicea señaló que se considera la distribución de las importaciones clasificadas entre mercancía tributable y no tributable. Durante el periodo considerado en el estudio la proporción de importaciones tributables sobre el IVU promedia un 26 por ciento. Esta proporción fluctúa a través del periodo, alcanzando los puntos más álgidos en el 2021, con 30 por ciento, y en el 2022 con 27 por ciento.
Parés Alicea agregó que se hicieron otros ajustes en el estudio para conciliar la base potencial seleccionada de importaciones registradas, como tomar en cuenta las compras realizadas por el gobierno, que están exentas de IVU; descartar de la base del IVU artículos de sectores identificados en la agricultura, la minería, utilidades y manufactura y la revisión del sector de servicios de alojamiento y alimentación, que tiene una subcategoría con ventas tributables, como licores, vinos y alimentos preparados.
Modernización de los procesos
Parés Alicea destacó que el éxito obtenido por la agencia que dirige en los porcentajes de captación del IVU en los últimos años ha respondido a varias medidas que su administración ha implementado, principalmente la plataforma del Sistema Unificado de Rentas Internas (SURI).
El secretario mencionó la digitalización y simplificación de los procesos a través de la plataforma, la reducción en un 80 por ciento de las transacciones que se hacen en las colecturías y la rigurosidad del sistema, como varias de las herramientas que han logrado este despunte en los porcentajes de captación del IVU.
“Consideramos que un determinante para la reducción de la brecha tributaria o mejoras en la captación ha sido la modernización e implementación de una plataforma tecnológica de avanzada, la cual provee al sistema contributivo una mayor visibilidad sobre las transacciones que se registran entre compradores y vendedores durante el ciclo económico”, explicó el funcionario.
“La plataforma SURI facilita el cumplimiento voluntario de los contribuyentes, en la medida en que sirve de disuasivo a la evasión y mediante la simplificación, reduce el tiempo de procesamiento y el costo de cumplir para los contribuyentes”, sostuvo.
En el caso de los servicios, el secretario indicó además que el DH se acogió la metodología utilizada en el estudio de 2016 por el doctor José Alameda Lozada, que estima la base como un constructo estadístico en función de la relación entre los patrones de consumo tributables de bienes tangibles y servicios.
Se determinó una tasa de 58 por ciento como la proporción entre la base imponible de servicios y la base de mercancía.
A diferencia del estudio de 2016, señaló, en este caso se examinaron variaciones ocurridas durante ciertos periodos como son la inclusión en la base de mercancías de una tasa especial de 6 por ciento en el 2015, el aumento a 10.5 por ciento de la tasa del IVU y el comienzo del impuesto B2B o servicios ofrecidos por comercios a comercios y servicios designados, además de la introducción de una tasa especial para los alimentos preparados a partir de octubre de 2019.