Siguiendo el consejo de su médico, el papa Francisco se brincó el domingo su acostumbrada bendición pública de mediodía ya que se está recuperando tras haber sido sometido a una cirugía abdominal, pero siguió la misa en la televisión desde un hospital en Roma y rezó en privado, informó el Vaticano.
Francisco también almorzó en su apartamento del décimo piso del hospital con médicos, enfermeros y otro personal médico, y miembros del servicio de seguridad del Vaticano, informó en un comunicado escrito el vocero del Vaticano Matteo Bruni.
El cirujano que realizó el miércoles la operación de tres horas para reparar una hernia abdominal y remover una dolorosa cicatriz interna que resultó de operaciones previas, dijo que el pontífice de 86 años de edad empezó una dieta semilíquida.
El doctor Sergio Alfieri también le dijo a la prensa que el personal médico externó a Francisco sus preocupaciones de que incluso si el pontífice daba el saludo y la bendición pública de mediodía desde un balcón al final del pasillo de su cuarto de hospital, podría esforzarse de más y desgarrar una malla prostética que le insertaron como parte de la curación de la hernia.
Si eso llegara a suceder, se necesitaría otra cirugía. La bendición pública suele tardar unos 15 minutos.
Citando la evaluación del personal médico, Bruni dijo el domingo que la recuperación del pontífice se desarrollaba con normalidad. “Hizo terapia respiratoria y continuó movilizándose”, dijo Bruni.
De joven, a Francisco le extirparon un pulmón debido a una infección, por lo que su función pulmonar es observada de cerca. En marzo, el pontífice pasó unos días en el mismo hospital para recibir antibiótico intravenoso debido a una bronquitis que provocó que Francisco tuviera fiebre.
La mañana del domingo, Francisco “siguió la santa misa en vivo en la televisión y recibió la eucaristía”, dijo Bruni. Francisco luego recitó la tradicional oración de mediodía conocida como Angelus en una pequeña capilla en el apartamento papal que Gemelli tiene preparado para los pontífices.
El domingo por la noche, el Vaticano dio una breve actualización sobre el progreso del papa, diciendo que pasó bien la tarde. “El papa Francisco ha podido dar algunos pasos. Se dedicó durante unas horas al trabajo, alternándolo con el descanso y la oración″, dijo la oficina de prensa de la Santa Sede.
Incluso antes de la operación, caminar ha sido un reto para Francisco, debido a un problema crónico de rodilla. Dependiendo de la distancia, utiliza una silla de ruedas o un bastón para desplazarse.
No se ha anunciado ninguna fecha para el regreso de Francisco al Vaticano. Pero Alfieri reveló el sábado que el personal médico le estaba animando a pasar toda esta semana en el hospital para que estuviera en mejor forma para gestionar su pesada carga de trabajo una vez que volviera a casa.
Hace dos años, cuando Francisco fue operado para extirparle una sección del colon que se le había estrechado, el pontífice, flanqueado por algunos niños hospitalizados, pronunció una bendición dominical desde un balcón del décimo piso del hospital, siete días después de esa intervención. Fue dado de alta 10 días después de la operación.