Unas once fotos del cuerpo de Keishla Rodríguez Ortiz cuando fue recuperado de la laguna San José desfilaron hoy ante el jurado en el quinto día de juicio contra el exboxeador Félix Verdejo en el Tribunal Federal en San Juan.
Las imágenes fueron presentadas como parte del interrogatorio del fiscal federal Jonathan Gottfried al agente del Negociado de la Policía de Puerto Rico, Manuel Colón Ruiz.
Según reporta Telenoticias, Colón Ruiz explicó que las impactantes fotos fueron capturadas cuando llegó hasta el cadáver que flotaba en la Laguna San José cerca del puente Teodoro Moscoso. El agente, quien para entonces trabajaba para la División de Homicidios del Cuerpo de Investigaciones Criminales de San Juan, detalló que pudieron llegar hasta el cuerpo en una embarcación de la Policía.
Relató que una vez cercano al cadáver pudo identificar que se trataba de una mujer y que su ropa era color azul y su pelo era rubio y marrón.
El reportero José Esteves de Telenoticias narró que en las crudas imágenes que pudo ver el jurado y que el agente describió, el cuerpo de Rodríguez Ortiz se encontraba atado con un alambre por el cuello, la muñeca izquierda, la cintura y los pies. Indicó, además, que del alambre en el área de la cintura, colgaba un bloque de hormigón. De las fotos más cercanas realizadas al cuerpo se podía ver las marcas que dejaron los alambres.
El agente Colón Ruiz, indicó que luego de documentar la escena, posteriormente, decide sacar el cuerpo de la Laguna para trabajarlo en las facilidades de FURA en Isla Verde y luego se trasladó al Instituto de Ciencias Forenses.
El agente relató ante el juez Pedro Delgado que luego fueron a buscar la guagua Durango color negra de Félix Verdejo. Manifestó que información en su poder apunta a que se encontraba frente a la residencia de su progenitora. Recordó que llegaron hasta allí, sin embargo nadie respondió. Ante las circunstancias, solicitaron al tribunal una orden de registro y allanamiento.
Una vez ocupada la guagua Durango, Colón Ruiz dijo que se movilizan hasta una residencia en la Urbanización Golden Gate 1 en Bairoa, en Caguas, donde hallaron la guagua Honda, Pilot, color negra. El agente dijo que en esa guagua habían visto a Verdejo transitando por el puente Teodoro Moscoso en momentos que levantaban el cadáver de Rodríguez Ortiz.
El agente relató que al llegar a esta residencia quien le contestó fue una mujer de nombre Jennifer Acevedo que vestía una ‘baby doll´. La mujer le afirmó que Verdejo se encontraba en la casa y procedieron a entregarle la orden de allanamiento.
Es en esta residencia que le le ocupan un arma de fuego para la que tenía licencia. De igual manera le piden su teléfono celular pero este le indica que no lo tenía. Por órdenes de su abogado Jorge Colina, lo había dejado en su oficina, relató el agente.
Colón Ruiz señaló, además, que al preguntarle por su otra arma, Verdejo le indicó que estaba en el condominio San José en Río Piedras, residencia de Eliz Marie Santiago Sierra, la madre de su hija.
Según Colón Ruiz, los agentes se movilizaron al lugar y al llegar quien les contestó fue Miguel Santiago, padre de Santiago Sierra. Luego de explicarle para lo que estaban allí, Santiago Sierra los lleva hasta su habitación donde había una caja fuerte y en su interior el arma de fuego.
Posteriormente, Verdejo entregó el celular a las autoridades. Precisamente, otro de los testigos que sentó la fiscalía hoy a declarar fue un empleado de Homeland Security, Ricardo Díaz Torres, quien tuvo a su cargo analizar y extraer la información del celular del exboxeador.
Al momento se presentaba en sala varios mensajes que el expúgil sostuvo con su esposa Eliz Santiago entre en el 26 y 27 de abril y donde supuestamente le reclama por una relación extramarital. Entre los mensajes, algunos soeces, Verdejo le dice que estaba “arrepentido”, aunque no establecían que se tratara de la relación que sostuvo con Rodríguez Ortiz.
Cruz Manuel García, entrenador de Verdejo y Jason Martínez Marcial de la División de Registro de Armas, fueron otros de los testigos que se presentaron hoy durante el juicio.
A preguntas de la fiscal federal Janet Collazo, García indicó que entrenó al boxeador para el 29 de abril de 2021, fecha en la que se dice que Rodríguez Ortiz había acordado encontrarse con Verdejo para mostrarle la prueba de embarazo. García señaló, además, que Verdejo acordó encontrarse al otro día para entregarle un dinero para un viaje que este realizaría, sin embargo el exboxeador no llegó ni tampoco contestó sus llamadas. García describió ese comportamiento de Verdejo como inusual.
El juicio aún continúa con el testimonio del empleado de Homeland Security, quien extrajo información del celular de Verdejo.