El expresidente Donald Trump, que acaba de asistir a su tercera comparecencia judicial como acusado en un caso penal en su contra, pronunció el viernes un discurso cargado de rebeldía y bravuconería, en el que insultó a los fiscales y declaró que los cargos que enfrenta benefician a su campaña por la nominación republicana a la presidencia en 2024.
“Cada vez que presentan una imputación, subimos mucho en las encuestas”, aseveró Trump durante una cena del Partido Republicano en Alabama. “Necesitamos una acusación formal más para concluir exitosamente las elecciones. Una imputación más y estos comicios están ganados. Nadie tiene siquiera una oportunidad”.
Trump se declaró el jueves inocente de delitos relacionados con sus intentos para anular los resultados de su derrota electoral en 2020. Aunque fue su tercer encausamiento penal este año, este caso es el más grave. En él el gobierno federal, que alguna vez encabezó, lo está acusando de orquestar una conspiración para impedir la transferencia pacífica del poder.
Sin embargo, como es usual en él, Trump no ofreció disculpas al subir al escenario el viernes en la noche a los acordes de la canción “God Bless the USA” (“Dios bendiga a Estados Unidos”) de Lee Greenwood, haciendo una señal de aprobación con el pulgar, elevando el puño y siendo ovacionado de pie durante casi tres minutos.
“Vamos a andar por aquí un rato”, bromeó, y le solicitó al público que se sentara.
La lista más reciente de acusaciones se centra en los dos meses transcurridos entre su derrota de noviembre de 2020 ante el demócrata Joe Biden y el asalto al Capitolio federal del 6 de enero de 2021. Trump dice no haber hecho nada malo, y ha vinculado su campaña presidencial para 2024 con su defensa jurídica y sus afirmaciones falsas de que se cometió un fraude electoral en su contra en 2020.
En una muestra de esa rebeldía, su equipo de campaña difundió el viernes en línea un anuncio en el que ataca a Jack Smith, fiscal especial del Departamento de Justicia que encabezó la investigación que derivó en los cargos más recientes contra el exmandatario y un caso separado en el que se le imputa el manejo indebido de documentos secretos.
El anuncio, que se prevé comience a difundirse por televisión la semana entrante, también critica al fiscal federal de Manhattan, Alvin Bragg, que ha acusado a Trump de pagar dinero en un caso para comprar silencio, y a la fiscal federal del condado Fulton, Fani Willis, que se cree está cerca de presentar cargos derivados de su pesquisa sobre los intentos del exmandatario y sus aliados para anular los resultados de los comicios de 2020 en Georgia.
Un colaborador de Trump dijo que el mensaje comenzará a transmitirse el lunes y martes en Washington, D.C., Nueva York, Atlanta y en la televisión por cable a nivel nacional. El anuncio también fue mostrado a la multitud que asistió el viernes en la noche a la cena en Alabama.
