Hasta 11,484 beneficiarios pudieran quedar inelegibles para recibir el Plan de Salud del Gobierno, conocido como el Plan Vital, aún luego de pasar por el proceso de recertificación de Medicaid, según un estimado para el cual fueron utilizados datos recopilados entre abril y junio de este año.
Así lo reconoció la subdirectora de la Administración de Seguros de Salud (ASES), Roxanna Rosario Serrano, en el XXIII Foro Anual de la Industria de la Salud, organizado por el Colegio de Contadores Públicos Autorizados (CCPA), que reunió funcionarios y directores de organizaciones de la industria de salud para dialogar sobre los retos y las oportunidades en los programas de salud y sus regulaciones.
La cifra representa cerca del 9.3 % de una muestra total de 123,130 personas, pero la subdirectora indicó que podría aumentar en los próximos meses. Hasta marzo de este año, el Plan Vital acoge cerca de 1.3 millones de beneficiarios, detalló la funcionaria.
El panelista Rafael Graulau Reyes, quien funge como director de Programa de Medicaid Enterprise Systems, añadió que, adicional a ese porcentaje, “hemos experimentado un promedio entre 60 a 70 mil ‘no shows’, que si fuésemos a desactivarlos por el efecto del ‘no show’, ese nueve por ciento hay que llevarlo exponencialmente”.
Según datos del análisis presentados por la subdirectora de ASES, los grupos de prima más impactados por desactivar personas inelegibles son beneficiarios de Medicaid entre las edades de 19 a 64, cuyo costo de prima disminuyó un 3.2 %. Mientras, en los clientes duales con partes A y B — que incluye seguro por visitas al hospital y médicos, entre otros servicios, según Medicare —, aumentó un 12.4 %.
“Estos análisis los tenemos que ver en contexto del perfil de salud de la gente. Así que, donde la prima baja, es porque están saliendo personas que tienen algunas de las condiciones que consideramos crónicas agudas, como diabetes, hipertensión, problemas cerebrovasculares o comorbilidad. En los casos donde la prima aumenta, se te están yendo personas que tienen mejor perfil y se te está quedando un grupo con un perfil de salud más complejo”, explicó Rosario Serrano.
La funcionaria también indicó que tanto el Plan Vital como el Gobierno de Puerto Rico “están realizando las evaluaciones necesarias” para crear una alternativa dirigida a que aquellas personas declaradas no elegibles para que no queden desprovistas de servicios de salud.
Asimismo, la doctora Gloria del C. Amador, presidenta del centro 330 Salud Integral en la Montaña, sugirió evaluar la creación de una “cubierta intermedia” para los no asegurados con una prima basada en sus ingresos y que sean los centros 330 y los grupos médicos de Puerto Rico con capacidad de servicio los que cubran esa necesidad.
Urgen a realizar la recertificación de Medicaid a tiempo
Graulau Reyes explicó que el proceso de recertificación comienza el primero de cada mes y consiste en ciclos de 60 días. Tras pasar por el proceso ex parte, el cual determina con documentos disponibles qué beneficiarios serán renovados automáticamente y cuáles deben pasar por el proceso de recertificación, las aseguradoras envían por correo los formularios, que indican la fecha de expiración, a los beneficiarios identificados y deben recibirlos, en promedio, entre los días 15 a 22 del mes correspondiente a su ciclo.
“La realidad que hemos visto es que comienzan a aparecer a finales de mes. Tenemos unas ideas, que vamos a estar trabajando con los MCO’s (organizaciones de atención administrada) y los centros 330, para tratar de ser un poco más proactivos y levantar bandera a estos beneficiarios, aunque no estén en el ciclo, tengan plena conciencia de cuándo les toca para que tengan su información lista y no esperen a última hora”, planteó.
Asimismo, la principal oficial de Operaciones de MMM MultiHealth, la licenciada Solange DeLahongrais-Taylor, indicó que, por no acudir a las citas a tiempo, se provoca un alza en volúmenes que “se está convirtiendo inmanejable” para atender, pero apuntó a los cuatro distintos mecanismos disponibles para pasar por la recertificación.
“Las oficinas locales no dan abasto y la cultura, y los que estamos en áreas de servicio sabemos, que al puertorriqueño le gusta el ‘face-to-face’. Está el portal [del Ciudadano], está el ‘call center’, está el correo [y] ASES ahora tiene una aplicación que va a tener unas interfaces, que esa información va a viajar a Medicaid y la persona puede hacer el ‘upload’ de los documentos, como hacemos ahora en el CESCO (Centro de Servicios al Conductor)”, indicó la licenciada.
“Tiene que existir un sentido de urgencia. Pienso que estamos un poco tarde en que sintamos esa urgencia. Nadie quiere que las personas se queden sin el cuidado que necesitan”, instó DeLahongrais-Taylor.