El proyecto presentado por la representante del Proyecto Dignidad (PD), Lisie Burgos, que busca penalizar los espectáculos realizados por transformistas o “drag queens” no aplica a personajes de la comedia puertorriqueña que también son interpretados por artistas del género opuesto al que están personificando.
Así lo confirmó la propia representante quien aseguró que personajes como “Cuca Gómez” de Otilio Warrington “Bizcocho” o “Plinia” de Raymond Arrieta tienen un “valor artístico” contrario a lo que Burgos piensa sobre los transformistas.
“Esto ya puede caer en lo que el Tribunal Supremo de Estados Unidos determina que es libertad de expresión porque tiene algún valor artístico”, expresó la legisladora en el programa Jugando Pelota Dura (TeleOnce).
Por el contrario, Burgos indicó que espectáculos con “personajes que se visten con una ropa verdaderamente provocativa” y que según la representante muestran gran parte de su cuerpo frente a menores sí serían penalizados.
“Todo lo que tenga que ver con lascivia que sea altamente sexual, que tenga que ver con propuestas...juguetes sexuales. Hemos visto videos que frente a menores se hace una especie de proposiciones que son altamente sexuales y eso es lo que queremos legislar y proteger a los menores de esas conductas que nada aportan a su desarrollo mental, a su desarrollo físico y a su desarrollo emocional”, expresó la representante en el espacio televisivo.
Sobre la diferencia entre lo que hacen Raymond Arrieta o Bizcocho con sus personajes de comedia femeninos y los transformistas esta indicó que se refiere a: “personajes que se visten con una ropa verdaderamente provocativa enseñando casi todo su cuerpo y haciendo unos gestos y unos movimientos que son altamente sexuales a eso es a lo que nos estamos oponiendo, a estos no esto tiene valor artístico y los conocemos de años y quién no se ha reído con alguno de ellos”.
La medida radicada en la Cámara de Representantes pretende prohibir y criminalizar los espectáculos artísticos de transformistas o ‘Drag Queens’ que sean realizados frente a menores de edad ya sea en áreas públicas o establecimientos privados.
Se trata del Proyecto de la Cámara 1821, con el cual se pretende crear un nuevo artículo al Código Penal de Puerto Rico con el fin de crear el delito de exposiciones obscenas frente a menores e incluye a las presentaciones realizadas por ‘drag queens’.
La medida propone añadir el Artículo 137 sobre “exposiciones obscenas frente a menores” y las califica como “una actuación grotesca dirigida a apelar el interés lascivo, interés morboso en la desnudez, sexualidad o funciones fisiológicas en una forma patentemente ofensiva, representa o describe conducta sexual, que incluye, pero sin limitarse a mostrar genitales masculinos o femeninos, mostrar objetos o juguetes sexuales que simulen los senos femeninos, la vulva, la vagina, el pene, el ano o que simulen actos sexuales tales como, pero sin limitarse a un acto orogenital o una penetración sexual vaginal o anal ya sea esta genital, digital, instrumental o masturbación, removerse la vestimenta con fines de crear un interés erótico y despertar las pasiones sexuales”.
Además, el artículo incluye disposiciones que aplican a los espectáculos de ‘Drag Queens’.
“Personificar al sexo masculino o femenino con vestimenta alusiva al sexo masculino o femenino, sin limitarse a la utilización de pelucas, máscaras o maquillaje grotesco en un establecimiento, facilidad abierta o cerrada, pública o privada, restaurante, teatro, vías pública o toda propiedad donde se realicen actividades artísticas o que brinden entretenimiento infantil o familiar”, añade la medida presentada por Burgos.
En caso de que se lleven a cabo este tipo de acción considerada como “obscena” por la medida de la representante se impondrían multas de hasta $5,000 o hasta una pena de tres años en prisión. En caso de que sea una persona jurídica se expondría a una multa de hasta $25,000 por una segunda infracción.
El proyecto especifica que estos “actos obscenos” no se podrían realizar en un establecimiento, facilidad abierta o cerrada, pública o privada, restaurante, teatro, vía pública o toda propiedad donde se realicen actividades artísticas que brinden entretenimiento infantil o familiar que pueda ser presenciados por personas menores de 18 años de edad.
Del mismo modo, la medida busca que no se lleven a cabo este tipo de “exposiciones obscenas” en instituciones educativas del país, no que se utilicen fondos públicos estatales ni federales para “la prestación de actividades o espectáculos que tengan contenido grotesco según definido en el Artículo 137 de este código Penal en escuelas o instituciones educativas del Estado y/ cobijadas bajo el Consejo de Educación de Puerto Rico”.
En caso de que esto ocurra, la medida propone también una multa de $5,000 hasta pena de tres años en prisión para directores escolares, maestros o personas que faciliten la actividad en una institución educativa.
Rechazan la medida desde la comunidad LGBT
Ante la radicación de esta medida, el activista de la comunidad LGBT+, Pedro Julio Serrano, catalogó como “disparatada” el Proyecto 1821.
“La representante del Proyecto Indignidad no sabe qué más inventarse para intentar demonizar, degradar y deshumanizar a la comunidad LGBTQ+. Lo irónico es que tratando de atacar a las personas LGBTQ+, este proyecto tendría el efecto de criminalizar a personas como Kobbo Santarrosa, que se esconde detrás de La Comay. Así de amplia, disparatada y peligrosa es esta medida”, indicó Serrano en declaraciones escritas.
“Medidas tan absurdas como ésta han sido declaradas inconstitucionales en otros estados, pues violan el derecho a la libre expresión, a la libre asociación y hasta al derecho amplio a la libertad cobijados bajo las Constituciones de Estados Unidos y Puerto Rico. Basta ya de utilizar a las personas LGBTQ+ como chivos expiatorios en su agenda de división, odio y exclusión”, añadió.