WASHINGTON (AP) — El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, volará a Florida en las próximas horas para inspeccionar los estragos causados por el huracán Idalia, pero no tendrá una reunión con el gobernador y aspirante a la candidatura presidencial republicana Ron DeSantis, quien insinuó que el encuentro podría perjudicar las labores de respuesta al desastre.
“No tenemos planes para que el gobernador se reúna con el presidente”, dijo el vocero de DeSantis, Jeremy Redfern, en un comunicado. “En estas poblaciones rurales, tan poco después del impacto, los preparativos de seguridad que requeriría semejante encuentro paralizarían los trabajos de recuperación”.
Idalia tocó tierra el miércoles por la mañana en la región llamada Big Bend como huracán de categoría 3 y provocó inundaciones y graves daños antes de desplazarse hacia el norte para anegar Georgia y las Carolinas.
Sin embargo, la visita de Biden para inspeccionar los daños podría conducir a choques políticos desde la declaración de DeSantis, horas después de que el presidente dijera el viernes que se reuniría con el gobernador.
La vocera de la Casa Blanca, Emilie Simons, dijo que “el presidente Biden y la primera dama (Jill Biden) esperan reunirse con miembros de la población impactada por el huracán Idalia e inspeccionar los impactos de la tormenta”.
“La visita a Florida ha sido planeada en estrecha coordinación” con personal de la Agencia Federal de Manejo de Emergencias, “así como con líderes estatales y locales para asegurar que no afecte las operaciones”, dijo Simons en un comunicado.
Después de aterrizar en el aeropuerto de Gainesville, Biden realizará una gira de inspección aérea rumbo a Live Oak, donde recibirá informes sobre los trabajos de socorro y recuperación y se encontrará con funcionarios y socorristas. Luego verá de primera mano el impacto de la tormenta sobre la población y hará declaraciones.