Una organización no gubernamental con sede en Afganistán indicó que los Talibán entraron, dos veces, en su sede en la provincia de Ghor, en el centro del país, y detuvieron a 18 cooperantes por predicar sobre el cristianismo, quienes fueron trasladados a la capital, Kabul.
“El bienestar y la seguridad de nuestros compañeros es fundamental para nosotros. Estamos haciendo todo lo posible para garantizar su seguridad y que sean liberados rápidamente y a salvo”, dijeron.
Medios afganos informaron que un portavoz del gobierno provincial, Abdul Wahid Hamas, informó que entre los detenidos hay varias mujeres, entre ellas una estadounidense, y el cargo que se les imputa es “propagar y fomentar la cristiandad”.
La ONG explicó en su página web que trabaja en Afganistán para mejorar la vida de la gente y para colaborar en el ámbito sanitario, educativo y de la organización de la sociedad civil. “Colaboramos con la gente afgana y con voluntarios internacionales cristianos desde 1966″, destacó.
La estricta versión de la religión musulmana impuesta por los talibán cuando se hicieron con el poder hace ya dos años prohíbe a las mujeres estudiar a partir de secundaria e impide trabajar a la mayoría de ellas. Las mujeres tienen prohibido trabajar en ONG extranjeras, gimnasios, baños públicos, y deben viajar acompañadas de un hombre en desplazamientos largos.