El Negociado de la Policía de Puerto Rico y el Departamento de Justicia llevaron a cabo un operativo donde se realizaron alrededor de 380 arrestos en 76 pueblos del país. El operativo impactó a 12 organizaciones criminales que operaban en la isla.
El mismo se considera la operación de mayor complejidad y extensión que ha llevado a cabo la Uniformada en los pasados años.
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El coronel de la Policía, Antonio López Figueroa, indicó que, como parte del operativo denominado “Desenmascarando el crimen”, realizado en víspera de la Noche de Halloween, 12 pandillas dedicadas a la venta de armas y drogas y la comisión de delitos violentos fueron impactadas. De igual modo, detalló que los agentes del Negociado de Drogas y de Inteligencia y Arrestos diligenciaron 189 órdenes de arresto, 64 de allanamientos contra individuos y miembros de organizaciones y efectuaron 191 arrestos adicionales en intervenciones variadas. Sin embargo, se podrían sumar arrestos adicionales en el transcurso de la tarde y los próximos días. Faltan 35 fugitivos con órdenes de arresto pendientes.
López Figueroa estableció que gran parte de las investigaciones confidenciales, que se llevaron a en diferentes fases, surgieron en respuesta a las querellas de los ciudadanos sobre actividades ilegales que irrumpían la paz en sus comunidades.
“Este operativo es la mejor evidencia de que las denuncias de los ciudadanos están siendo escuchadas y atendidas. Hay situaciones que toman años de investigación y que estratégicamente no salen a la luz pública hasta concluirlas. No todos los agentes trabajan en patrullas con biombos y sirenas, muchos laboran arduamente desde el anonimato para reducir la incidencia criminal en las comunidades. Los policías que logaron estos arrestos hoy son esos que no transitan en patrullas rotuladas ni llevan uniformes. Si los mecanismos de quienes violan las leyes cambian, la Policía refuerza sus estrategias para combatir el crimen”, manifestó el comisionado.
El secretario de Justicia, Domingo Emanuelli Hernández, señaló que cerca de 20 fiscales, a través de las 13 fiscalías y la división de Crimen Organizado, formularon sobre 369 denuncias en casi todo el país, con fianzas que ascendieron a la cantidad de $57 millones.
“Tenemos prueba contundente para demostrar estos cargos más allá de duda razonable, gracias a la labor titánica de los fiscales de la División para Combatir el Crimen Organizado y Drogas del Departamento de Justicia, así como las 13 fiscalías de distrito, junto a los hombres y mujeres valientes que representan dignamente a la Policía de Puerto Rico. Desde hoy, los 380 imputados arrestados a través de toda la Isla no podrán continuar cometiendo delitos porque serán procesados criminalmente. Sus actuaciones delictivas acabaron”, expresó Emanuelli Hernández.
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Durante la investigación se identificaron 11 comercios en cuyo interior o en las inmediaciones se realizaban transacciones de mercancías ilegales y eran focos de violencia. La evidencia recopilada apunta a que ocho propietarios o administradores estaban involucrados en la operación de estos puntos.
Además, se ocuparon 78 armas de fuego, sobre 50 vehículos de motor, cerca de $100 mil dólares en efectivo y gran cantidad de sustancias controladas.
El jefe de la Policía destacó que es notable el aumento en el uso de Internet para coordinar las ventas y entrega de armas y drogas, especialmente por jóvenes y universitarios en el área Oeste, lo que representa retos mayores en la labor investigativa. No obstante, pudieron corroborar que la venta de armas adquiridas en las intervenciones comenzó con una fase de mercadeo en las redes sociales.
“Los arrestos de hoy a través de toda la Isla es el resultado del trabajo efectivo que llevan a cabo las diversas unidades del Negociado de la Policía junto a las agencias federales desde hace varios meses. En el DSP continuaremos apoyando al Negociado asignando el presupuesto necesario tanto estatal como federal para seguir añadiendo tecnología y proveerles las herramientas necesarias para lograr resultados como el de hoy, asimismo estamos enfocados en desarticular y sacar de la calle a estas organizaciones criminales”, sostuvo el secretario del Departamento de Seguridad Pública (DSP), Alexis Torres.
El esfuerzo resultó en el arresto de líderes de múltiples organizaciones criminales.
“Algunas de ellas están integradas por parejas, familias completas e incluso individuos que cumplen probatoria federal, mientras que hay tres grupos dirigidos por mujeres. Entre las actividades que se les imputan a los arrestados figuran la realización de transacciones ilegales frente a menores de edad y en áreas recreativas frecuentadas por estos, en o cerca de establecimientos comerciales, por internet y en competencia agresiva con otros grupos delictivos, además de asesinatos”, añadió el director del a Superintendencia de Operaciones Especiales, el coronel Carlos Cruz Burgos.
Entre los grupos criminales intervenidos, figuran los Zambrana, en el pueblo de Coamo, a quien se les vincula con múltiples asesinatos. Además, se encuentran el dueño de negocios en Lares y Camuy y su familia inmediata. A estos, se suman un grupo que operaba en la calle Sosa y una pandilla del residencial Muñeca, ambos en Aguadilla, así como la familia Clemente en Toa Baja.
Por su parte, la jefa de los fiscales, Jessika Correa González, resaltó que “hoy, reafirmamos el compromiso de los fiscales del Departamento de Justicia con hacer las calles de Puerto Rico más seguras. Este operativo es el resultado de la cooperación y coordinación estrecha entre la Policía y el Departamento de Justicia, a través de la División para Combatir el Crimen Organizado y las fiscalías de distrito. Como jefa de los fiscales, agradezco a todos los funcionarios que laboraron arduamente para lograr sacar de las calles de Puerto Rico a estos criminales”.
El Cuerpo de Investigaciones Criminales (CIC) de la Policía investiga varios asesinatos vinculados a las actuaciones de estos grupos.
“Las investigaciones de narcotráfico y delitos violentos son complicadas y sumamente riesgosas para los agentes. Nuestro sistema de justicia conlleva procesos de recopilación de pruebas que requieren tiempo y recursos para que se sostengan los cargos criminales en los tribunales. Eso es precisamente lo que han estado haciendo nuestros efectivos, con los resultados que vemos en el día de hoy”, afirmó el Comisionado López Figueroa.
“Para luchar contra la violencia en las calles es necesario trabajar en equipo. Felicito a los compañeros de la Policía de Puerto Rico y al Departamento de Justicia por un gran trabajo. El pueblo de Puerto Rico merece tener paz en sus comunidades y pueden contar con el FBI para esta misión”, puntualizó el director del Negociado Federal de Investigaciones (FBI por sus siglas en inglés), Joseph González.
Para llevar a cabo este operativo de manera casi simultánea a nivel de toda la Isla, fue necesario activar todas las divisiones que integran la Superintendencia de Operaciones, liderada por el coronel Cruz Burgos, así como agencias federales, tales como el Federal Bureau of Investigation (FBI), Homeland Security Investigations (HSI), con sus dependencias como Immigration and Custom Enforcement (ICE).
Algunos resultados del operativo
En Coamo fueron detenidos 16 miembros y la líder de la organización Zambrana, que operaba en la comunidad del mismo nombre y controlaba los puntos de venta de drogas en la zona. El grupo está vinculado a un doble asesinato de un sujeto asociado el narcotráfico y a una mujer ajena a la actividad criminal, en las inmediaciones de un colmado, a principios de mayo.
En Lares, los agentes arrestaron a una organización completa, integrada por el dueño de dos negocios, Giro Pop en Lares y Coco Whiskey en Camuy, a su pareja e hijos, y a varios tiradores de drogas. Estos también son investigados por asesinatos y otros actos violentos.
En Aguadilla, la Policía intervino con dos grupos. Por un lado, detuvo a ocho personas, entre ellas a la encargada de administrar un punto que operaba en la calle Sosa, en el sector calle nueva de ese municipio. Por otro lado, en el residencial Muñeca, arrestaron al líder de una pandilla, que disfruta del privilegio de libertad bajo probatoria federal. Dicho residencial ha sido escenario de delitos violentos por disputas con una pandilla del residencial San Andrés, en San Sebastián, por el control de las ventas de sustancias. En dichos lugares se han producido incidentes violentos que han afectado la tranquilidad de la comunidad.
En Toa Baja, arrestaron a cinco miembros de la familia Clemente, incluyendo al líder, en el sector 26 de ese municipio. En Corozal se intervino con un punto de venta de sustancias, liderado por una pareja, en la calle Idilio de ese municipio. En Fajardo, se intervino con varios puntos organizados cerca de tres negocios que aprovechaban la clientela que acudía a esos lugares para realizar transacciones.
“Alineados con nuestra misión de identificar y desarticular organizaciones criminales ligadas al narcotráfico y al trasiego de armas ilegales, HSI San Juan puso a la disposición del Negociado de la Policía de Puerto Rico los recursos que fueron necesarios incluyendo agentes federales de ley y orden, y nuestro Equipo de Respuesta Especial (SRT) para apoyar este operativo alrededor de la Isla. Durante los pasados seis días, nuestra colaboración incluyó el ejecutar órdenes de arresto de individuos previamente identificados, así como órdenes de allanamiento en residencias o lugares de operaciones ilegales; y el garantizar la seguridad del equipo involucrado durante inspecciones realizadas a negocios ligados a actividad criminal violenta. Este operativo es un ejemplo más del compromiso de las agencias de ley y orden estatales y federales para continuar el trabajo en equipo con el fin de restaurar la paz en nuestras comunidades. HSI se mantiene inamovible en ese compromiso y enfocados en nuestra misión”, dijo, la agente especial a cargo de HSI San Juan, Rebecca González Ramos.