El Senado de Puerto Rico aprobó esta semana la medida que busca viabilizar el establecimiento de santuarios con el fin de atender la crisis de caballos realengos en los 78 municipios del archipiélago.
Se trata de la Resolución del Senado 846, la cual ordena a las comisiones de Agricultura y Recursos Naturales y la de Asuntos Municipales y Vivienda a realizar una investigación sobre los terrenos abandonados disponibles en la Isla que puedan ser utilizados para crear estos espacios.
Para la directora ejecutiva de la organización sin fines de lucro Cuidado de Caballos Post Competencia del Caribe (CTA, por sus siglas en inglés), Kelley Stobie, esta medida “atiende, por primera vez, y de forma real y concreta, una situación que tenemos en Puerto Rico”.
El proyecto se aprobó con 26 votos a favor. Las comisiones, ahora, tendrán hasta 90 días para rendir su informe sobre los locales idóneos para desarrollar estos santuarios.
“Nuestro rol es rescatar caballos, alimentarlos, brindar servicios veterinarios y promover su adopción, principalmente aquí, en Puerto Rico, así como en varios estados. En estos momentos tenemos 17 caballos en nuestra finca y el número aumenta pues existe una realidad de muchos caballos realengos”, aseguró.
Stobie precisó que, una vez se logren desarrollar estos santuarios, la meta será preparar a los equinos para el proceso de adopción para así evitar la eutanasia.
La R.S. 846 es la autoría del portavoz alterno de la delegación del Partido Nuevo Progresista (PNP), en ese cuerpo legislativo, Carmelo Ríos.
La CTA es una organización sin fines de lucro que tiene como objetivo el mantenimiento y eventual adopción de los caballos purasangre cuando terminan su etapa competitiva, la cual es de apenas de tres a cinco años.
