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Urgen al gobierno localizar los recursos para prevenir y atender la violencia de género

En el Día Internacional de No Más Violencia Contra la Mujer, Metro Puerto Rico dialogó con expertas sobre la situación actual de las mujeres en el país

Aunque la lucha para erradicar la violencia contra la mujer es una constante en Puerto Rico, hoy, sábado, al conmemorarse el Día de No Más Violencia Contra la Mujer, expertas han retomado la conversación sobre la situación actual de las mujeres en el país.

Según el Observatorio de Equidad de Género de Puerto Rico, que monitorea y analiza las condiciones en las que viven las mujeres, niñas y personas LGBTT, este año se han documentado 63 casos de feminicidios.

Estos se subdividen de la siguiente forma: 19 feminicidios íntimos relacionados a situaciones de parejas y exparejas, 31 casos que todavía están bajo investigación, cuatro casos de menores de edad, dos feminicidios a manos de familiares, un transfeminicidio, y seis casos relacionados al crimen organizado.

“Si miramos un poco cuál es el estado de situación en los pasados cinco años, por decir algo, lo que observamos es que hay una presencia constante de violencia de género en nuestra cotidianidad”, expresó, en entrevista con Metro Puerto Rico, la doctora Elithet Silva-Martínez, directora de la Escuela Graduada de Trabajo Social en la Universidad de Puerto Rico (UPR).

“Así que, lo que vemos es que, en efecto, continúa siendo este un asunto de salud pública, un asunto de urgencia a atender en Puerto Rico, especialmente cuando lo comparamos con otros países en términos proporcionales”, continuó.

Evidente la falta de fondos para las organizaciones

A pesar de que el Estado relega, en las organizaciones, la responsabilidad de acompañar a las víctimas y testigos de violencia contra la mujer, no necesariamente les provee los recursos para realizar dicho trabajo, según las partes entrevistadas.

“Ciertamente, en términos gubernamentales y de organizaciones, hay algo. Hay algunos recursos, pero definitivamente y sin temor a equivocarme, tengo que decir que no son suficientes”, aseguró Silva-Martínez. De hecho, el Departamento de Justicia se comunicó con Metro para plantear que cuentan con técnicos de asistencia a víctimas y testigos que acompañan a estos en todos los procesos judiciales.

La doctora Irma Lugo Nazario, coordinadora del Observatorio de Equidad de Género, ejemplificó que hay organizaciones a las que se les ha recortado la mitad de su presupuesto, mientras que, a otras ni siquiera se les ofrecen recursos monetarios.

“Es otra manifestación de violencia, que sería la violencia institucional de parte del Estado. Cuando conoce y reconoce que son las organizaciones las que dan la cara, las que resuelven, las que están trabajando en contra de esta temática, y los recursos son menos”, sostuvo.

Por lo tanto, las expertas resaltaron la urgencia de localizar los recursos y la importancia de la voluntad política para asegurar que se estén atendiendo estos asuntos.

“Es importante cuidar nuestros recursos, tener esa voluntad política de tomar decisiones sabias respecto a la vida humana en un país donde a muchas mujeres se les asesina en sus casas. ¿Cómo eso no nos atraviesa?”, puntualizó Silva-Martínez.

Los múltiples traumas tras un feminicidio

Tras el lamentable y doloroso suceso que es un feminicidio, los testigos y familiares, más allá de experimentar el duelo, quedan trastocados por el trauma.

“Son múltiples duelos. Lo que observamos en el estudio de la violencia es que, en ocasiones, tienes el duelo de perder a tu madre en el caso de asesinato, de feminicidios y suicidio, que ese es un ángulo”, dijo Silva-Martínez, quien codirige el proyecto Siempre Vivas Metro.

“Pero tenemos también casos de niños y niñas que pierden a su madre, y su padre permanece en la cárcel. Entonces, tienes un doble duelo donde te preguntas: ‘¿qué pasó conmigo?’ y sientes un sentido de desamparo”, añadió.

Por otro lado, también está el ángulo de la madre que debe lidiar con el dolor de perder a su hija y, a su vez, asumir la crianza de sus nietos y nietas, por lo que las expertas coincidieron en que son necesarios los espacios de acompañamiento, como lo son la Alianza para la Paz Social (ALAPÁS) y la Oficina de Compensación y Servicios a Víctimas y Testigos.

Lugo Nazario destacó la importancia de generar conciencia sobre los temas de violencia contra la mujer, pues “va más allá de esa inmediatez de perder esa mujer en una situación de un feminicidio, pero entonces ese entorno familiar cómo se afecta, cómo queda impactado y su comunidad”.

La prevención es clave

Además de las herramientas para monitorear e intervenir con los casos de violencia de género, o para acompañar a las sobrevivientes y sus allegados, es clave abordar la prevención, por lo que resulta indispensable la educación con perspectiva de género, tanto en las escuelas, como en el hogar.

“Nos toca como sociedad. En algún momento, tenemos que empezar a pensar cómo prevenimos esto. Sí, hay que erradicarlo, sí, hay que trabajar con la intervención, pero ¿cómo hacemos como sociedad para que estos casos no ocurran?”, expuso Silva-Martínez.

En cuanto a la implementación de un currículo con perspectiva de género en el sistema educativo del país, Lugo Nazario sostuvo que “no se ha hecho nada, lamentablemente”. En adición, Silva-Martínez señaló que el tema se ha politizado y tergiversado mucho.

Las expertas destacaron la importancia de implementar un currículo con perspectiva de género, de forma que, desde temprana edad, los niños y niñas aprendan sobre la igualdad de género y las relaciones interpersonales saludables.

Silva-Martínez aseveró que la niñez es una etapa clave para comenzar a abordar estos temas.

“Qué tierna es nuestra niñez, y estamos desperdiciando un momento precioso para darle herramientas sobre cómo nos vinculamos, cómo son esas relaciones saludables. De chiquito, como decimos en Puerto Rico, se llega grande. Así que, tener conversaciones sobre equidad, solidaridad, sobre el propio tema de prevención de violencia de género”, puntualizó la trabajadora social.

Asimismo, Lugo Nazario comentó que las universidades también juegan un papel importante en la educación de género, aunque, por lo usual, esta resulta opcional.

“Hay cursos creados que trabajan estas temáticas que, para muchos estudiantes, son cursos electivos, no son cursos que son obligatorios dentro de su currículo formal, así que no se logra llegar a todos esos cuerpos de grupos profesionales, de futuros profesionales en formación”, manifestó.

Si usted o alguna persona conocida está en una situación de violencia, llame a la Línea de ayuda 787-489-0022 o a la Coordinadora Paz para la Mujer 787-281-7579. Mire más recursos de ayuda aquí.

De igual forma, puede llamar a la Línea de Orientación y Ayuda Contra la Violencia Sexual (LOA), al 787 337-3737, o al Centro de Ayuda a Víctimas de Violación, al 787-765-2285; a la línea de emergencia de la Oficina de la Procuradora de las Mujeres, al 787-722-2977, o a la Línea de emergencia y ayuda 939 CONTIGO (266-8446). Mire más recursos de ayuda aquí.

Aquí puedes ver el episodio del podcast Con Los Editores sobre este tema:

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