QUITO (AP) — La Fiscalía General informó hoy, domingo, que un nuevo ataque armado en una ciudad del suroeste de Ecuador dejó al menos cinco personas muertas cerca de un concurrido centro comercial.
A través de un mensaje en la cuenta de la red social X, antes conocido como Twitter, la Fiscalía informaron que abrió de oficio la investigación por el asesinato de cinco personas y que junto a la policía se realizó el levantamiento de cadáveres e indicios.
El hecho ocurrió la víspera en Durán, ubicada unos 264 kilómetros al suroeste de la capital y que esta considerada entre las ciudades más peligrosas de Ecuador, junto con Guayaquil y Esmeraldas. En lo que va de 2023, las muertes violentas en esa ciudad superan las 300, según cifras oficiales.
Con 300.000 habitantes y altos niveles de pobreza y marginalidad, Durán se ha convertido en un punto estratégico para la operación de organizaciones criminales vinculadas al narcotráfico, donde, además se han encontrado embodegados importantes cargamentos de droga, debido a que sus vías y accesos conectan con el puerto de Guayaquil, según las autoridades.
De acuerdo con reportes e imágenes difundidas en las redes por los medios locales, las víctimas eran conductores de tricimotos, un tipo de vehículo popular que ofrece el servicio a menores costos y que pertenecían a una compañía que operaba cerca del establecimiento. El suceso ocurrió mientras los conductores se encontraban reunidos a la espera de clientes, según esos reportes.
Ni la autoridades ecuatorianas, ni la Fiscalía informaron sobre las motivaciones del atentando, sin embargo, medios locales citaron testimonios que preliminarmente señalan se trataría de un caso de extorsión.
Videos que se difundieron en redes sociales dejaron ver algunos de los cuerpos tendidos en el suelo junto a las tricimotos, en medio del lamento de familiares.
En otras imágenes, personas que se encontraban al interior del centro comercial grabaron el momento en que se produjo el ataque armado y la reacción que generó entre los asistentes, quienes corrían por los pasillos o se agachaban.
En mayo, el alcalde de Durán, Luis Chonillo, salió ileso de un atentado que dejó tres muertos, mientras un fiscal, funcionarios municipales y un concejal de la ciudad han muerto en ataques armados.
