La vicepresidenta de los Estados Unidos, Kamala Harris visito el viernes a Puerto Rico en una corta estadía que duró solo unas horas.
En el recibimiento de la funcionaria se encontraba el gobernador Pedro Pierluisi, el alcalde de San Juan Miguel Romero, entre otros.
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Entre los diferentes lugares que visitó Harris, la misma llegó hasta un centro comunitario en Santurce, donde escuchó al personal del centro sobre su trabajo de apoyo a los artistas locales.
También, al llegar a la escuela Goyco en Santurce, fue recibida con la participación de un grupo de pleneros que cantaban: “Queremos saber, queremos saber, a qué viniste Kamala, qué viniste a hacer”.
“Queremos saber, queremos saber a qué viniste Kamala que viniste a hacer” canta un grupo de pleneros en la escuela Goyco en Santurce. La VP ríe. pic.twitter.com/qlXAjvtjHe
— Nuria Sebazco (@nsebazco) March 22, 2024
La vicepresidenta reaccionó con risas ante la interpretación de los pleneros.
Su visita se produce días después de que el presidente estadounidense Joe Biden inició una campaña dirigida a los votantes latinos con vistas a las elecciones generales de noviembre. Los puertorriqueños no pueden votar en la elección presidencial de Estados Unidos a pesar de ser ciudadanos estadounidenses, pero más de 5 millones de puertorriqueños viven en territorio estadounidense continental.
La primera parada de Harris fue una casa en el municipio norteño de Canóvanas, cerca de la capital. La casa quedó destruida cuando el huracán María golpeó la isla en septiembre de 2017 como una poderosa tormenta de categoría 4 y provocó la muerte de 2,975 personas.
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Por el camino, la comitiva se cruzó con personas que sostenían sus teléfonos en alto. Algunos espectadores se asomaron de sus carros para tomar fotos mientras esperaban a que pasara la comitiva, y otros se quedaron en la puerta de negocios y casas. Una joven sostenía un cartel en el que pedía ayuda para arreglar su casa.
“Veo que estamos haciendo una diferencia. Aún hay mucho trabajo que hacer”, dijo Harris, en el césped de la nueva casa, que estaba decorada con una gran bandera de Puerto Rico. “Somos ambiciosos. Sí, somos impacientes”.
Harris dijo que uno de los desafíos actuales de Puerto Rico es la intermitencia en el suministro de energía, ya que siguen ocurriendo apagones diariamente desde que María arrasó con la red eléctrica. Observó que el gobierno federal ha proporcionado cerca de 3,000 millones de dólares en fuentes confiables de energía, como paneles solares para los tejados. También envió generadores el año pasado.
El gobernador Pedro Pierluisi le agradeció a Harris y a Biden por su ayuda: “Están con nosotros en esta reconstrucción”.
Horas antes de la llegada de Harris, una veintena de manifestantes se congregó en la capital de Puerto Rico para lamentar el estatus de la isla como territorio y para exigir un cese al fuego en la guerra entre Israel y Hamás.
“Nos parece una falta de respeto su presencia”, dijo Joselyn Velázquez, vocera de la protesta, mientras un grupo que la rodeaba ondeaba banderas palestinas.
Cerca de ahí, un manifestante pisoteó una bandera estadounidense mientras otros reunían más de ellas y les prendían fuego.
“Aquí no es bienvenida”, dijo un manifestante.
Tras visitar la casa en Canóvanas, Harris hizo una parada en un centro comunitario de San Juan donde se reunió un pequeño grupo de manifestantes que gritaban:”Yankee, go home” (Yanqui, vete a casa), mientras que sus partidarios coreaban “U.S.A., U.S.A.”.
Harris tiene programado dar un discurso en un mitin de campaña antes de volar de vuelta a Estados Unidos continental la tarde del viernes.