El Departamento de Justicia de Puerto Rico y el Negociado de la Policía anunciaron un acuerdo de colaboración con el cual buscan reducir la incidencia de crímenes violentos en la isla, como parte de la Operación Alto al fuego.
Esta iniciativa conjunta cuenta con alrededor de 500 agentes de la Policía de Puerto Rico, asignados a diferentes grupos de trabajo, y un equipo de fiscales del Departamento de Justicia local altamente cualificados.
Según se indicó, al plan de trabajo se suman los fiscales estatales que fungen como enlaces con las autoridades federales en cada una de las 13 Fiscalías de Distrito de la Isla durante los procesos de consulta de los casos con miras a identificar la jurisdicción más conveniente para su procesamiento. De esta forma, se agiliza la colaboración durante las investigaciones.
Simultáneamente, la Policía y sus distintas divisiones continuarán trabajando en el Operativo 100 X 35 y el programa denominado Vigilancia y Seguimiento a Gatilleros, que hoy en día ha producido el arresto de sobre 10, 000 individuos y sicarios que mantenían actividad criminal continua y sembraban el terror en las comunidades.
El secretario de Justicia de Puerto Rico, Domingo Emanuelli Hernández, indicó que la Operación Alto al fuego “representa una medida adicional, a las que ya llevamos a cabo con las autoridades federales, para continuar desmantelando organizaciones criminales de alto nivel y procesando los delitos violentos en la Isla, ya sea a través de la jurisdicción estatal o federal”.
Por su parte, el comisionado de la Policía, el coronel Antonio López Figueroa, enfatizó que “en los esfuerzos que realiza la Policía para combatir el crimen en todas sus dimensiones existe una estrecha colaboración con los colegas de las agencias federales. Como parte del rol de la Policía en esta operación, continuaremos compartiendo información producto de las estrategias de inteligencia de las distintas unidades y divisiones con el propósito de procesar a estos individuos en la jurisdicción cuyas leyes y procesos sean más severos”.
“En el Departamento de Seguridad Pública continuamente trabajamos en coordinación con las agencias federales y municipales con un solo fin de combatir los crímenes violentos en Puerto Rico. Continuaremos asignando los recursos y equipo necesario para la seguridad del pueblo. La Operación Alto al Fuego es una iniciativa de las agencias de ley y orden dirigidas a desarrollar la inteligencia e investigaciones en áreas de alta incidencia criminal con un trabajo en equipo donde los recursos y la tecnología serán dirigidos a desmantelar las organizaciones criminales transnacionales”, destacó el secretario del Departamento de Seguridad Pública, Alexis Torres.
