NUEVA YORK (AP) — Los miembros del jurado en el juicio de Donald Trump escucharon una grabación el jueves del exmandatario discutiendo con su entonces abogado un plan para comprar el silencio de una modelo de Playboy que ha dicho que tuvo una aventura con el expresidente.
Un Trump visiblemente irritado se inclinó hacia adelante en la mesa de la defensa, y los miembros del jurado parecían fascinados mientras los fiscales reproducían la grabación de septiembre de 2016 que el abogado Michael Cohen hizo en secreto de sí mismo cuando informaba a su cliente sobre un plan para comprar la historia de Karen McDougal de una relación extramatrimonial.
Aunque la grabación salió a la luz hace años, es quizás la prueba más pintoresca presentada a los jurados hasta ahora para conectar a Trump con los pagos que son el centro de su juicio penal en Manhattan. Se presentó luego de horas de testimonio de un abogado que negoció el acuerdo para comprar el silencio de McDougal y que admitió estar asombrado de que sus esfuerzos pudieran haber contribuido a la victoria de Trump para llegar a la Casa Blanca.
“¿Qué hemos hecho?”, le escribió el abogado Keith Davidson en un mensaje de texto al entonces jefe de redacción del tabloide National Enquirer, que había ocultado historias de encuentros sexuales para impedir que el público las conociera en los últimos días de la reñida contienda por la presidencia. “Oh, Dios mío”, fue la respuesta de Dylan Howard.
“Había un entendimiento de que nuestros esfuerzos podrían de alguna manera... nuestras actividades podrían de alguna manera haber ayudado a la campaña presidencial de Donald Trump”, les dijo Davidson a los jurados, aunque reconoció al ser interrogado que trató directamente con Cohen, nunca con Trump.
El testimonio de Davidson fue pensado para vincular directamente los pagos para adquirir silencio con las ambiciones presidenciales de Trump, y para reforzar el argumento de los fiscales de que el caso es sobre interferencia en los comicios de 2016, en lugar de ser sencillamente sobre sexo y dinero. El fiscal de distrito de Manhattan, Alvin Bragg, ha buscado establecer ese vínculo no sólo para asegurar una declaración de culpabilidad, sino también para persuadir al público de la relevancia del caso, que podría ser la única de cuatro acusaciones contra Trump en derivar en un juicio este año.
“Esto es una especie de humor negro. Fue en la noche del día de las elecciones, mientras estaban llegando los resultados”, explicó Davidson. “Había cierta sorpresa entre las emisoras y otros de que el señor Trump fuera al frente de las encuestas, y había una creciente sensación de que la gente estaba lista para proclamar al ganador”.
Davidson es visto como un componente vital de los argumentos de la fiscalía de que Trump y sus aliados conspiraron para ocultar historias desfavorables en el periodo previo a las elecciones presidenciales de 2016. Él representó a McDougal y a la actriz porno Stormy Daniels en negociaciones que derivaron en la adquisición de los derechos de sus alegatos de que habían sostenido encuentros sexuales con Trump, y en que esas historias fueran suprimidas, una práctica del sector de los tabloides conocida como “atrapar y matar”.
Davidson es uno de varios participantes clave que dan su testimonio antes que Cohen, el principal testigo de la fiscalía, que le pagó a Daniels 130.000 dólares a cambio de su silencio y también se grabó a sí mismo —semanas antes de las elecciones— diciéndole a Trump acerca de un plan para adquirir los derechos de la historia de McDougal al National Enquirer, de forma que nunca saliera a la luz. Previamente, el tabloide había comprado la historia de McDougal para desaparecerla en nombre de Trump.
En un momento de la grabación, Cohen reveló que había hablado con el entonces director financiero de la Organización Trump, Allen Weisselberg, sobre “cómo montar todo el asunto de la financiación”. A lo que se oye a Trump responder: "¿Cuánto tenemos que pagar por esto? ¿Uno cincuenta?”.
Se oye a Trump sugerir que el pago se haga en efectivo, lo que provoca que Cohen se oponga diciendo “no” varias veces. Entonces se oye a Trump decir “cheque” antes de que se corte la grabación.