El gobernador de Puerto Rico, Pedro Pierluisi, firmó una medida aprobada en la legislatura que deja claro que la prohibición de los plásticos de un solo uno exime a las farmacias, laboratorios, hospitales y cualquier institución que por ley federal prohíbe el uso de materiales reusables.
Pierluisi firmó el Proyecto de la Cámara 2131, para enmendar el Artículo 4 de la Ley Núm. 51-2022, a los fines de aclarar que la prohibición de la práctica de entregar o utilizar plásticos de un solo uso dentro de los límites en la Isla no aplicará a farmacias, laboratorios, hospitales y cualquier otra institución y entidades, tanto públicas como privadas que, debido a legislación o reglamentación del gobierno federal o del gobierno de Puerto Rico se restringe, condiciona o prohíbe el uso de materiales no plásticos y el reúso de productos plásticos en prácticas y actividades salubres específicas.
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La medida fue presentada inicialmente por el presidente de la Cámara de Representantes, Rafael “Tatito” Hernández. Luego, fue aprobada con enmiendas en el Senado por lo que regresó a la Cámara.
“Hay renglones en áreas de nuestra sociedad, donde la legislación de Puerto Rico y la legislación del gobierno federal prohíben el reúso de envases o materiales plásticos, en aras de salvaguardar la salud humana y ambiental. Un ejemplo de esto es en el sector de la salud, donde farmacias, laboratorios, dispensarios, oficinas médicas y hospitales se restringe abarcadoramente la posibilidad de usar envases o materiales no plásticos, por propósitos de seguridad sanitaria. A pesar de que en estas instituciones el uso de estos materiales es un “campo ocupado”, la Ley Núm. 51-2022 no contempla esta realidad y su lenguaje promueve la creencia de que en estas industrias la prohibición de uso de plásticos de un solo uno aplica también. Esta enmienda solo pretende reconocer la excepción a la prohibición a estos sectores”, lee la medida.
El pasado 1ro de julio entró en vigor el periodo de seis meses de transición para que los negocios eliminen los plásticos de un solo uso o sustituirlos por productos que no dañen el ambiente.
La prohibición entrará en vigor el 1ro de enero del 2025 y los negocios se expondrán a multas de no cumplir con la ley.
