El comisionado de la Policía de Puerto Rico, Antonio López Figueroa, confirmó que en el caso de la bebé dejada en un hospital y cuya madre apareció con signos de agresión, se activaron cinco protocolos como parte del proceso de investigación.
“Las circunstancias que rodean este caso, están siendo investigadas de manera amplia, integrada y sin descartar ningún ángulo”, aseguró el jefe de la Policía.
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En el caso de la bebé, se activó el protocolo de notificación al Departamento de la Familia, así como el protocolo de delitos sexuales y maltrato de menores.
La menor fue entregada este viernes por un hombre a una guardia de seguridad del Hospital Regional de Bayamón. Según el informe preliminar, el sujeto que no ha sido identificado, llegó alrededor de las dos de la madrugada a pie hasta la caseta de seguridad, entregó dos carpetas con información personal y supuestamente alegó que la madre del infante había sido golpeada.
En el caso de la madre, aunque ella atribuye el incidente del que fuera víctima a dos vecinas de su complejo residencial, la Policía activó tres protocolos: el de violencia doméstica, el de delitos sexuales y el de agresión.
“En horas de la mañana, llega hasta el cuartel de Puerto Nuevo una señora que alega que fue agredida por dos damas en el residencial Los Laureles en Bayamón y que es madre de una menor que se la quitaron en el residencial. Ahí empatamos que se relaciona a la madre de la niña que fue abandonada”, expresó el comandante Elexis Torres en entrevista con varios medios de comunicación a las afueras del cuartel.
Según el comisionado de la Policía, a la madre se le está asistiendo en todo este proceso y fue llevada a recibir asistencia médica por los serios golpes que presentaba.
La activación de los cinco protocolos conlleva la integración de agentes de múltiples divisiones de la Policía, además de la investigación paralela que realice el Departamento de la Familia.
