El gobernador Pedro Rafael Pierluisi Urrutia reiteró en la tarde del martes que las clases continúan suspendidas y el trabajo no esencial en el Gobierno de Puerto Rico.
Pierluisi indicó que en la conferencia de prensa que se llevará a cabo mañana a las 11:00 a.m. se anunciará si se retoman o no las labores en el sector público.
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Hasta el momento, se han reportado 42 refugiados en 47 refugios en 34 municipios. Además, se reportó una persona electrocutada en el Barrio San Isidro en Canóvanas mientras limpiaba el drenaje en el techo de su residencia. Fue atendido en un hospital del área en condición estable.
La tormenta tropical Ernesto continúa avanzando hacia las Islas Vírgenes y Puerto Rico, con un fortalecimiento anticipado que podría convertirlo en un huracán esta noche, según el Centro Nacional de Huracanes (CNH). A las 5:00 de la tarde, el centro de Ernesto se localizaba a unas 135 millas al este-sureste de San Juan, moviéndose hacia el oeste-noroeste a 18 millas por hora (mph).
El CNH mantiene una vigilancia de huracán para las Islas Vírgenes de los Estados Unidos, las Islas Vírgenes Británicas, y las islas de Vieques y Culebra. Además, Puerto Rico permanece bajo advertencia de tormenta tropical, lo que significa que las condiciones de tormenta tropical se esperan en la región esta noche y posiblemente condiciones de huracán en las áreas bajo vigilancia.
Se espera que Ernesto pase cerca o sobre las Islas Vírgenes esta noche y luego al noreste y norte de Puerto Rico durante la noche del martes y la mañana del miércoles. Las autoridades anticipan que la tormenta podría traer lluvias torrenciales de entre 6 a 8 pulgadas en el sureste de Puerto Rico, con cantidades máximas de hasta 10 pulgadas, mientras que el noroeste de la isla podría recibir entre 2 a 4 pulgadas de lluvia. Estas lluvias incrementan significativamente el riesgo de inundaciones y deslizamientos de tierra en las áreas afectadas.
Adicionalmente, se espera una marejada ciclónica que podría elevar los niveles del agua entre 1 a 3 pies sobre el nivel del suelo a lo largo de la costa este de Puerto Rico, desde San Juan hasta Guayama, incluyendo las islas de Culebra y Vieques, así como en las Islas Vírgenes de los Estados Unidos y Británicas. Las olas grandes y destructivas asociadas con esta marejada podrían agravar las condiciones peligrosas en las zonas costeras.
El CNH también advierte sobre el peligroso oleaje que está afectando ya a Puerto Rico, las Islas Vírgenes y las islas vecinas, lo que podría generar corrientes marinas que amenazan la vida. Se recomienda a los residentes y visitantes seguir de cerca las actualizaciones del tiempo y tomar las precauciones necesarias.
