Siete años después del impacto del huracán María en Puerto Rico, miles de millones en fondos federales se han destinado a municipios, agencias gubernamentales y organizaciones sin fines de lucro para impulsar proyectos de recuperación, pero aún no es palpable un avance.
De hecho, el programa Working Capital Advance (WCA), adelantó el 25% de los fondos obligados por la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA, por sus siglas en inglés) a unos 1,630 proyectos, equivalentes a $2,295 millones en 2022. Sin embargo, para 2024, del dinero adelantado solo se han utilizado alrededor de $517.6 millones, lo que representa apenas el 25% de los proyectos finalizados.
Para el director ejecutivo de la Oficina Central de Recuperación, Reconstrucción y Resiliencia (COR3, por sus siglas en inglés), el ingeniero Manuel A. Laboy Rivera, esto ha sido un avance positivo en comparación con la cifra de utilización de fondos reflejada en años anteriores.
“Esto ha sido un game changer. Esto no solamente ha ayudado la reconstrucción permanente de estos desastres, pero también está impulsando los proyectos de mitigación de riesgos. Ha sido bien exitoso en ese sentido, y cada vez— esto se lanzó en verano de 2022— hemos visto cómo cada agencia ha aprovechado este programa para beneficio de adelantar sus proyectos”, destacó Laboy Rivera en entrevista con Metro Puerto Rico.
El director, además, comentó que el programa ha sido descrito por FEMA como “innovador” y apoyado incluso por la administración Biden-Harris. No obstante, no negó que la cifra de fondos oficialmente documentados como usados por las entidades es ínfima. Desde un punto de vista optimista, resaltó que “siempre hay espacio para la mejoría”.
Según la información encontrada en la sección de “subrecipient dashboard” (panel de subreceptor) del Portal de Transparencia de la agencia, las agencias gubernamentales han utilizado un 26.6%, los municipios un 17.8%, mientras que las entidades sin fines de lucro un 4.6% de los fondos adelantados. Esto refleja que queda por desembolsar un aproximado de $1,680 millones de fondos.
“La reconciliación comparado en ahora, agosto y septiembre de 2024 y agosto y septiembre de 2023, ha sido bien positiva. Estamos cada vez (mejorando), en la dirección correcta”, opinó Laboy Rivera.
La utilización de los fondos adelantados depende de la complejidad de los proyectos, según el funcionario. Conforme a Laboy Rivera, algunos proyectos se han atrasado debido a la poca mano de obra disponible en el archipiélago, es decir, la escasez de contratistas. Las subastas se han reprogramado constantemente.
Aunque el WCA no tiene tiempo límite, cada proyecto cuenta con fechas estimadas de finalización. Sin embargo, el director ejecutivo de COR3 afirmó que no han tenido que flexibilizar las reglamentaciones de este programa, mas no detalló si alguna agencia había devuelto el dinero por su propia cuenta.
“Por ejemplo, hay muchos proyectos que son reparación de carreteras. Creo que queda claro que [...] es una cuestión de años, y entonces, nosotros nos encargamos de cada uno de ellos (las entidades) y la asistencia legal, apoyo, y acordar un plan de acción para poder acelerar el uso de su dinero. Así que, hay mucha interacción. Eso quiere decir, hay muchas reuniones, mucha visita y asistencia para que esa mejoría siga”, mencionó el director.
El reglamento del programa estipula que, durante los primeros 90 días— 60 días para las organizaciones sin fines de lucro— no era necesario la utilización completa de los fondos, pero se debió presentar un informe de progreso o una solicitud de reembolso de fondos (también conocido como el Project Formulation, Grant Review, Request for Reimbursement “RFR”).
En los siguientes 90 días (adicionales), las entidades debieron presentar un RFR, que puede ser por cualquier monto, sin necesidad de cubrir todo el adelanto del “Request for Working Capital Advance” (RFCA). Si la entidad deseaba solicitar un segundo adelanto (totalizando el 50%), el informe de progreso debe ser presentado en su totalidad y no prorrateado, lo cual puede implicar múltiples solicitudes de reembolso para validar el monto total del programa.
Si la entidad no cumple con estos requisitos, recibirá “una comunicación de COR3 informando sobre el incumplimiento y solicitando una reunión de trabajo”, para así desarrollar un plan de acción. De la entidad no cumplir con esta reunión o plan, COR3 podrá tomar medidas para recuperar los fondos, tal como se establece en la certificación firmada por la entidad.
Laboy Rivera, incluso, destacó que las entidades firman un acuerdo de subvención con COR3, para así poder evitar cualquier dificultad.
“En ese acuerdo de subvención, ellos se comprometen y asumen la responsabilidad de que todo se tiene que hacer en el cumplimiento como exige los requisitos federales y estatales”.
Dado a que las entidades con proyectos “en progreso” cuentan con el dinero en sus cuentas bancarias, surge la duda sobre el control de la utilización de estos. Para Laboy Rivera, esto no es una preocupación.
“No se supone que, a estas alturas del juego, ninguna agencia se aventure o se atreva a no seguir esas reglas. No ha pasado, hasta el momento. Nosotros no hemos encontrado alguna situación donde ha habido un mal uso del dinero. Pero en un escenario hipotético, a mí no me va a temblar la mano en que se lleve a las últimas consecuencias”, dijo el director.
Ante cambio de gobierno
La candidata a la gobernación por el Partido Nuevo Progresista (PNP), Jenniffer González Colón, reiteró, en abril, su compromiso de eliminar COR3 si resulta electa. Esta argumentó que la agencia ha demorado la reconstrucción en Puerto Rico tras los desastres, obligando solo un pequeño porcentaje de los fondos disponibles. La comisionada residente en Washington D.C. propuso crear la Oficina de Capacitación y Apoyo en Fondos Federales (OCAF) para facilitar la gestión de fondos, en lugar de ser un obstáculo como, según indicó, ha sido el COR3.
Por su parte, el candidato a la gobernación por la alianza entre el Partido Independentista Puertorriqueño (PIP) y el Movimiento Victoria Ciudadana (MVC), Juan Dalmau, catalogó a su contrincante de mentirosa y afirmó que su plan sería “imposible”, ya que FEMA requiere un intermediario en el manejo de fondos federales para la isla.
“Lo importante es la exigencia de ejecución frente a FEMA, frente al COR3 y frente a otras agencias federales; buscar formas que se ajusten a nuestra realidad topográfica caribeña. Puerto Rico es un archipiélago en el Caribe con unas particularidades, y FEMA ha tardado en dar meramente algunas excepciones con respecto al desembolso de los fondos. Pero con que prometa que va a eliminar el COR3, miente”, expresó.
Por otro lado, Laboy Rivera aseguró no temerle al pronto cambio de gobierno. Sin embargo, destacó que es importante la continuación de la reconstrucción en la isla.
“Cualquier candidato o candidata a la gobernación, todos están comprometidos con que se siga continuando la reconstrucción porque esto es vital. Esto es lo que está modernizando gradualmente y haciendo más resilientes nuestras facilidades”, concluyó.