El expresidente de la Cámara de Representantes, José Aponte Hernández, le solicitó este lunes al candidato presidencial estadounidense por el Partido Republicano, Donald Trump, que se exprese públicamente en repudio ante los comentarios ofensivos emitidos contra los puertorriqueños por el comediante, Tony Hinchcliffe, durante un evento de avivamiento del expresidente celebrado en el Madison Square Garden de Nueva York.
“Las desagradables y totalmente ofensivas palabras emitidas por el señor Hinchcliffe contra los ciudadanos estadounidenses que residimos en Puerto Rico durante un evento político partidista de la campaña de Donald Trump, deben ser repudiadas por todos, incluyendo al Expresidente. Es momento que el propio Donald Trump se exprese, censurando lo que fueron unas expresiones de odio y discrimen contra, no sólo los 3.2 millones de ciudadanos estadounidenses que vivimos en Puerto Rico, sino contra los sobre 6 millones que residen en los estados de la unión”, comentó Aponte Hernández en declaraciones escritas.
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Durante el rally de ayer, domingo, Hinchcliffe, abogando a la multitud que se dió cita en el histórico edificio por un voto a favor de Trump en las elecciones del 5 de noviembre, describió a Puerto Rico como “una isla flotante de basura en el medio del océano”.
El comediante expresó lo siguiente: “No sé si ustedes sepan esto, pero literalmente hay una isla de basura flotante en medio del océano en este momento. Creo que la llaman Puerto Rico”.
En respuesta a ello y a las acciones tomadas por algunos líderes del GOP, el líder estadista local añadió: “Hemos escuchado palabras de repudio de personas como el Senador Rick Scott (Republicano-Florida), entre muchos otros. También el propio Partido Republicano a nivel estatal censuró las expresiones. De igual forma, hizo el portavoz de la campaña de Trump para los Hispanos, Jaime Flores, quien condenó estos comentarios. Sin embargo, el expresidente no ha dicho nada y entendemos que es momento de que hable. Esas expresiones fueron bien fuertes y despectivas contra ciudadanos estadounidenses; no es momento de callar, es tiempo de hablar bien fuerte rechazando las mismas”.
La broma no tardó en recibir críticas del equipo de campaña de su contrincante por el Partido Demócrata, Kamala Harris, quien compite con Trump por los votos de las comunidades puertorriqueñas en Pensilvania y en otros estados sin clara preferencia política.
El equipo de campaña de Trump, usualmente combativo, tomó la inusual medida de distanciarse de Hinchcliffe.
“Esta broma no refleja las posturas del presidente Donald Trump ni de su campaña”, declaró la asesora del expresidente, Danielle Alvarez, en un comunicado de prensa.