El presidente de la Asociación de Maestros de Puerto Rico (AMPR), Víctor Bonilla, expresó preocupación ante la solicitud de la Junta de Supervisión Fiscal (JSF) al Departamento de Educación (DE) para detallar el uso de fondos federales no recurrentes y su impacto en las finanzas de la agencia, especialmente en la nómina y otros servicios esenciales.
Bonilla sostuvo que el asunto genera incertidumbre, ya que el 50 % del presupuesto del DE depende de fondos federales.
“Es importante que el departamento rinda el informe detallado de en qué se utilizaron esos fondos no recurrentes. Nosotros denunciamos la situación desde antes, porque sabíamos que si no llegaban esos fondos, habría un impacto significativo”, afirmó.
La Junta, a través de una carta firmada por su director ejecutivo, Robert Mujica Jr., pidió al DE que entregue antes del 14 de marzo de 2025 un informe con un detalle de las actividades cubiertas con fondos federales de emergencia no recurrentes, especificando cuáles de ellas representan gastos continuos y cuáles no.
El líder magisterial señaló que el secretario de Educación reconoció que algunas áreas como mantenimiento, seguridad y educación especial podrían verse afectadas. Sin embargo, indicó que, según la información recibida, la partida de nómina no debería verse impactada. “Tengo mucha fe en que el aumento a los maestros no se toque. Si la Junta se refiere a eso, el DE debe demostrar cómo se utilizaron los fondos y presentar un análisis para asegurar que se puedan mantener los servicios esenciales”, puntualizó.
Bonilla insistió en que el DE debe establecer un plan de acción en caso de que no se identifiquen fondos alternos. “Nosotros ya hicimos un ejercicio con el presupuesto consolidado e identificamos las partidas que dependían de fondos federales. Esto ascendió a cerca de $2,500 millones. Ahora le corresponde al DE definir cómo continuará ofreciendo los servicios sin depender de esos recursos y si utilizarán fondos estatales o del Fondo General del Gobierno”, sostuvo.
El presidente de la AMPR confirmó que el gremio planteará el tema en su próxima reunión con el secretario de Educación, la cual espera que se celebre en las próximas dos semanas.
“Nos estamos reuniendo mensualmente y este será el primer tema en la agenda. Es fundamental tener claridad sobre el impacto real de la pérdida de estos fondos y qué medidas se tomarán para mitigarla”, explicó.
Además, resaltó que el DE tiene hasta el 14 de marzo para entregar el informe solicitado por la Junta. “Conociendo la administración del DE, deben estar trabajando en un informe detallado que justifique el buen uso de los fondos. Pero más allá del informe, lo importante es presentar un plan de cómo garantizar la continuidad de los servicios esenciales sin depender de fondos federales”, reiteró Bonilla.
El impacto de la reducción de fondos federales es significativo, ya que desde el año fiscal 2021, el DE ha recibido aproximadamente $4,600 millones en fondos de emergencia que dejaron de estar disponibles en septiembre de 2024. La Junta alertó que estos fondos se han utilizado para gastos recurrentes en mantenimiento, seguridad, transporte, educación especial y nómina, lo que eleva el nivel de dependencia de la agencia en fondos externos.
Ante la incertidumbre, Bonilla instó al Gobierno y al DE a evaluar opciones para garantizar la estabilidad del sistema educativo. “Se pueden hacer transferencias dentro del mismo presupuesto para cubrir necesidades urgentes. Pero lo fundamental es que se gestionen recursos para evitar un impacto negativo en la educación de nuestros estudiantes”, concluyó.
