Los derechos de las personas con capacidad para gestar continúan enfrentando y resistiendo las violencias de género desde distintos sectores. Además del fracasado intento legislativo de limitar el acceso a cuidados de salud durante todas las etapas del embarazo, existen otros tipos de violencia de género que limitan los derechos y libertades de las personas con capacidad de gestar en Puerto Rico: la violencia obstétrica.
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Recientemente, varios medios de comunicación reseñaron la tragedia que vivió Aleicha Cruz Flores al sufrir violencia de género durante su embarazo, provocando la muerte de su recién nacida. Según la decisión emitida por el Tribunal Supremo de Puerto Rico, Cruz Flores estaba embarazada de 36 semanas de gestación, cuando su ginecólogo indujo su parto sin su consentimiento en el Hospital Ryder y sin informarle de las razones para ello. El resultado de esta acción fue la muerte de una infante prematura, luego de 12 días de nacida.
La Opinión emitida por el Tribunal omite reconocer la violencia obstétrica como una modalidad de la violencia de género. Sin embargo, la presidenta del Tribunal, en ese mismo caso, discrepó de la mayoría y reconoció las consecuencias fatales de violentar la autonomía de las personas gestantes sobre sus cuerpos y la capacidad de estas de tomar decisiones consientes sobre sus embarazos. La presidenta del Tribunal identificó la violencia obstétrica como violencia y discrimen por razón de género, y no como “impericia médica”. En otras jurisdicciones del mundo se reconoce y prohibe este tipo de violencia como una modalidad de violencia de género, sin embargo, en Puerto Rico no se ha aprobado la legislación que pretende erradicar este mal.
Un paso importantísimo en esa dirección es aprobar el Proyecto del Senado 454, presentado por las senadoras del PIP y del MVC. Para evitar que en Puerto Rico sigan muriendo infantes y que otras personas sufran la pesadilla que atravesó Cruz Torres y su familia, urge que aprobemos políticas públicas en contra de la violencia obstétrica como un asunto de derechos humanos.