La pasada semana la Junta de Supervisión Fiscal (JSF) nos sorprendió a todos con su nueva propuesta, su Plan de Ajuste de la Deuda (PAD) de la AEE. La misma establece un cargo promedio por cliente residencial, que no reciban subsidio, de $19 para aquellos que consuman más de 500 kilovatios-hora al mes. Como si fuera poco, la propuesta también considera una tarifa de conexión de alrededor de los $16 para clientes de pequeñas empresas, $20 al mes para pequeñas empresas industriales y $1,800 al mes para las grandes empresas. Esto, sin lugar a dudas, será un rudo golpe a la economía puertorriqueña que provocará el alza de precios en cadena en productos y servicios.
Esta propuesta de alza en tarifa tendrá un efecto en cadena que podría provocar el cierre de comercios, principalmente pequeñas y medianas empresas lo que sin duda afectará adversamente las arcas municipales. Ese efecto en los municipios se verá reflejado en el pago de patentes municipales, empleos y otros. Todo esto, más allá del impacto que suponen estos nuevos cargos a la economía familiar puertorriqueña, solo reducirá la deuda de la AEE en alrededor del 50 %.
El hecho de que al final siempre tendremos alguna cantidad que pagar en este proceso de quiebra, no puede ser razón para no promover un recorte de deuda mayor y así evitar cualquier cargo a los abonados. Los acreedores de la AEE tienen como garantía el Fondo de Deuda de la AEE. Permitir subir la tarifa más allá de eso sería quitar dinero a las familias y pequeños negocios para ponerlo en manos de inversionistas que no quieren aceptar su pérdida.
Empujar un cargo de esta magnitud sería devastador para la gente y va a tener efectos negativos en nuestra economía. La JSF tiene que promover un recorte mayor en la deuda y así evitar que la enorme mayoría de los abonados puertorriqueños paguemos las consecuencias de una deuda de la que ni país ni los municipios son culpables.
El país no aguanta más aumentos en el costo de vida. El sistema de energía eléctrica es fundamental para nuestro desarrollo económico y mientras más caro el servicio, más impacta negativamente la economía, baja el consumo, los ingresos de la AEE y peor aún los servicios directos que brindad nuestros alcaldes. Vamos a defender a la gente y a los municipios.