Mucho ha combatido y negado el partido Victoria Ciudadana la percepción de que son iguales a lo que ellos llaman el bipartidismo del PNP y el PPD. Los casos de Mariana Nogales y Manuel Natal ponen en entredicho su argumento de que son distintos.
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Hace unos años, cuando el exsenador del PNP Héctor Martínez fue acusado a nivel federal, parte de la delegación de ese partido llegó en una guagua al Tribunal Federal para apoyarlo ciegamente; me refiero a que asumieron una defensa sin prueba culpatoria o exculpatoria en mano. La defensa en ese momento fue solo porque se trataba de un PNP.
Hace unas semanas, con solo una citación al tribunal para la representante Mariana Nogales, parte de la delegación de Victoria Ciudadana llegó a una conferencia de prensa para apoyar a Nogales ciegamente; me refiero a que asumieron una defensa sin prueba culpatoria o exculpatoria en mano. La defensa en ese momento fue solo porque se trata de una afiliada a Victoria Ciudadana.
¿Notó la similitud de los hechos en ambos párrafos? Solo se cambia los nombres y los partidos, pero los hechos son similares: asumen defensas ciegamente, sin ver prueba y solo por ser de los suyos.
Eso sin contar que los abogados contratados por Nogales son figuras criticadas por sus seguidores, quienes alegan que son “abogados de corruptos” cuando asumen la representación de otros políticos. Cuando se enteraron de quiénes representarían a su líder, guardaron el discurso de “los abogados de corruptos”. O sea, ellos sí pueden contratar los mismos abogados que dicen “defienden a corruptos” y “es distinto”. El doble discurso e hipocresía es visible y constante, pero ellos sí pueden.
Cuando surgió la controversia de los “olvidos” de notificación de propiedades de la representante Mariana Nogales en sus informes éticos, ella misma solicitó que investigaran y proyectó seguridad de que no tenía nada que esconder. Sin embargo, cuando las investigaciones escalaron y parecieron llegar hasta las inversiones y si reportaban la totalidad de las ganancias a Hacienda, la defensa de Nogales pareció “quedarse con la emergencia en la mano” al intentar evitar en la primera etapa del proceso judicial que trascienda el contenido de las planillas de la legisladora, de su mamá y la corporación de estas (también acusadas) como evidencia.
Nogales tiene todo el derecho de combatir e intentar neutralizar, desde la primera campanada, cualquier movimiento e intento de los fiscales que buscan una convicción. Es un derecho que le asiste a cualquier persona inocente o corrupta, y, hasta el momento, a ella se le presume totalmente inocente. Claro, ellos sí pueden hacer eso… Pero, si los demás lo hacen, “algo esconden con las planillas”.
La legisladora, como cualquier político, tiene que atender, si quiere volver a ser reelecta, el juicio en el tribunal y el juicio en la opinión pública. Obviamente, se atiende en este momento principalmente el legal.
A Nogales, con toda probabilidad, le pasará lo que le pasa a cualquier político acusado de algo, y es que la mitad del país mantendrá el signo de interrogación incluso cuando la acusación puede ser fabricada, injusta, o aún cuando es declarado NO culpable.
Nogales y su partido ponen una vara muy alta a los políticos que no son de su combo con el tema de la transparencia ante el pueblo, y hasta parecieran insinuar que esos tienen que mostrarse casi desnudos para demostrar que no tienen nada que esconder. La pregunta es si Nogales lo hará y si el liderato de MVC lo exigirá como lo exigen a otros.
Nuevamente, en el caso criminal los abogados de Nogales parecen concentar sus mayores esfuerzos en suprimir la evidencia de las planillas, que no trasciendan. Suponiendo que la legisladora salga por la puerta ancha, la mancha de la duda sobre ella y el manejo de sus inversiones y sus planillas deben ser aclaradas más allá de toda duda por el bien de su reelección y por el bien del partido que tanto ronca exigiendo transparencia a los demás.
¿Mostraría Nogales las planillas luego del proceso al pueblo y se sometería a preguntas de la prensa en general? No lo sé, pero viendo las posiciones de MVC sobre los demás, pues no sería para menos que den el ejemplo que le piden a otros como aspirantes a manejar la cosa publica-gubernamental.
En este momento Nogales enfrenta un proceso judicial y toda persona tiene derecho a no autoincriminarse. El levantar ese derecho, aunque nos haga rascar la cabeza, no quiere decir que una persona es culpable. Es su libertad la que puede estar en juego. Ahora bien, de una persona como ella, que con tanta fuerza le reclama a otros, creo que sí, que una vez culmine el proceso y salga bien, si eso ocurre, se presentará ante el país con toda la documentación que evidencie que todas las planillas están en orden y así hará constar que todo fue una fabricación. Sé que ese será el reclamo de MVC y que con eso demostrarán que sí son distintos. Si no lo hacen… bueno pues sería otra contradicción, pero ellos si pueden… De Manuel Natal, por falta de espacio, comentaré la semana próxima.