Opinión

La recuperación del Sistema de Salud

Lee la columna de la portavoz del Movimiento Victoria Ciudadana en esta sección de opinión.

Rosa Seguí + columnista

En Puerto Rico existió un sistema de salud público conocido como el Sistema Arbona. A finales de la década del 1950, el doctor Guillermo Arbona fue nombrado como Secretario de Salud. El doctor Arbona, junto a otras personas, prepararon el plan de la regionalización del sistema de salud para toda la ciudadanía. Hubo en Puerto Rico un centro de diagnóstico y tratamiento en cada municipio, doce hospitales públicos y el Centro Médico de Puerto Rico.

PUBLICIDAD

El sistema público de Salud de Puerto Rico fue tan exitoso que en la década del 1970 que ocupó la posición 14 del mundo en expectativa de vida superando a Estados Unidos. El sistema no era perfecto, pero estaba bien diseñado, por lo que debió haberse mejorado, desarrollado y ampliado. Los millones que se han invertido en la privatización del sistema de salud se debieron haber invertido en el sistema público para reconstruirlo.

Por el contrario, se nos hizo creer que se debía desmantelar el sistema público y que la solución era vender el sistema y privatizarlo para “mejorarlo”. Se envió el mensaje de que quien pudiera tener un seguro médico que lo pagara y que quienes pudieran tenerlo a través del empleo, lo hicieran y los que no pudieran tener seguro, el gobierno lo proveería. Sin embargo, ya vemos el resultado terrible del experimento de la privatización. Vemos cómo las aseguradoras privadas, en la búsqueda insaciable de generar ganancias, exprimen a proveedores y a pacientes.

En Puerto Rico no estamos viendo el fracaso de lo público —como los partidos Partido Popular Democrático, Partido Nuevo Progresista y Proyecto Dignidad nos quieren hacer creer— sino que estamos viendo el fracaso del desmantelamiento de lo público. Estamos viviendo el fracaso de la salud como negocio, como mercado y el fracaso del mercado que supuestamente arreglaría todo los problemas. No nos engañemos, la única solución de fondo es la recuperación de los servicios de salud como responsabilidad social, en manos nuestras. La salud es un servicio público esencial.

Más columnas de Rosa Seguí:

Tags

Lo Último