El Partido Popular Democrático (PPD) no está preparado, hoy, para ganar las elecciones. Voy más allá, está lejos de un inicio para organizarse y convertirse de aquí a noviembre del 2024 en un partido con potencial de ganar. Todo lo contrario, su liderato “se come por los rabos” en una lucha de poder. La pelea interna que mantienen es mucho más dañina y amenazante, por el contexto histórico que vive la colectividad, que la que pueda representar para el PNP la división entre Pedro Pierluisi y Jenniffer González.
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El presidente del partido estadolibrista, Jesús Manuel Ortiz, tuvo un inicio de semana muy adverso cuando 14 legisladores se fueron contra su directriz y la de la Junta de Gobierno popular de no aprobar unas enmiendas al Código Electoral sin incluir en la discusión a Ortiz como presidente del partido, y sin tener su visto bueno.
Hace una semana y media la Junta aprobó una resolución que dejó “establecido que el tema del Código Electoral y las enmiendas, son un tema institucional y que cualquier negociación entre el PPD y los demás partidos políticos y legisladores independientes, estará encabezada por nuestro presidente, Jesús Manuel Ortiz como presidente de la Conferencia Legislativa, su equipo electoral”. El movimiento de la Junta se dió tras el presidente cameral, Rafael “Tatito” Hernández, haber anunciado en NotiUno 630 días antes que él iba a meterse (tomar control) y a trabajar las enmiendas al código. Conociendo que el líder cameral le guarda cero respeto, en términos de autoridad, Ortiz vino con refuerzos de la Junta, quizás esperanzado de que “Tatito” sintiera alguna presión.
Cuando Ortiz anunció la advertencia de la Junta, que iba a dirigida principalmente a Hernández Montañez, este, pareciendo seguir las recomendaciones del milenario libro “El Arte de la Guerra” de Sun Tzu, se retiró con sus tropas y guardó silencio. Esperó un viaje de Ortiz en el inicio de la sesión legislativa, salió del escondite con sus soldados, le bajó el lunes las enmiendas por descargue y las aprobaron, lo que provocó que Ortiz anunciara que aplicaría sanciones contra los 14 legisladores populares que votaron por los cambios al código.
Al utilizar la palabra “no toleraré” con “aplicar las sanciones correspondientes” hace ver que será severo con esos legisladores. No puede ahora venir con “un chorrito”. De otra parte, con lo que haga marcará a esos legisladores, algunos con veteranía en los quehaceres legislativos, para que les hagan campaña en contra, en las primarias y más allá de ellas. ¿Brinda una papeleta legislativa sin veteranos posibilidades de triunfo cameral? ¿Cómo queda el presidente si los 14 amonestados son revalidados en primarias internas por los propios populares? Creo que todos podrían quedar heridos.
No obstante, tampoco se puede negar que Ortiz no puede quedarse cruzado de brazos ante lo ocurrido, el reto y el daño que le hacen a su liderato. Ahora bien, Hernández Montañez es conocido por ser arrojado y temerario. Si Ortiz entendía que una presidencia del partido sería suficiente para controlarlo, pues se falló en el análisis. Ni con el refuerzo de la Junta se pudo. No es que “Tatito” votó a favor de las enmiendas, es que 13 cerraron filas con él, aún con la advertencia.
¿Puede confiar el PPD, teniendo ese asunto interno, en que las heridas que deje la primaria de Pierluisi y González serán suficientes para ellos prevalecer?
Hay otros factores que entran en la ecuación. Primero, el PPD también parece ir dirigido a una primaria, y con estos tiros que vemos, podría ser igual de contenciosa que la del PNP. Otro aspecto es que los dos candidatos de la palma tienen ya recursos económicos sustanciales para la campaña, y en el PPD se ha mostrado que no es su fuerte. Finalmente, habría que ver el efecto del desangre electoral que le pueda seguir socavando el Movimiento Victoria Ciudadana y el PIP.
El panorama más complicado para las próximas elecciones las tiene el PPD, quienes han estado fiscalizándose más a sí mismos que al gobierno. La discusión del Código Electoral no está en la boca de los puertorriqueños. ¿Cómo luce el PPD con sus luchas internas?, eso sí se está hablando.