En conmemoración de los más de 50 años de lucha por la justicia de las mujeres, la Coalición del 8 de marzo de Puerto Rico convoca a todas las personas a participar de la marcha que se llevará a cabo el 8 de marzo de 2024, a partir de las 3:30 p.m. saliendo de la Oficina de la Procuradora de las Mujeres hasta la Comisión Estatal de Elecciones, en Hato Rey.
Como expresa el lema de este año, se conmemoran más de 50 años desde la celebración del primer 8 de marzo en Puerto Rico. En 1974, la primera organización feminista autónoma de Puerto Rico, Mujer Intégrate Ahora (MIA), fundada en 1972, organizó una actividad en conmemoración del Día Internacional de las Mujeres, y a partir de entonces se ha celebrado ininterrumpidamente en Puerto Rico. En 1972, un grupo de valientes mujeres pertenecientes al Frente Femenino del Partido Independentista Puertorriqueño había organizado también una actividad inicial.
Necesitamos elegir personas al Gobierno que estén comprometidas con atender efectivamente la violencia de género. Por esto exigimos, entre otras cosas, educación con perspectiva de género. Desde la perspectiva de los derechos humanos de las mujeres, el Gobierno tiene el deber de proteger y garantizar la seguridad y la vida. Afirmamos nuestro poder político y demandamos que cumplan con su deber. Van 21 feminicidios en el 2024. Cada una de estas vidas arrebatadas por la violencia de género demuestra la falta de compromiso y la incapacidad de los partidos que han gobernado.
Desde sus orígenes, la declaración de un Día Internacional de las Mujeres tuvo como objetivo fortalecer la solidaridad de las mujeres trabajadoras del mundo. Este año nuestros corazones y esfuerzos también están con las mujeres y la niñez de Palestina, con todas las vidas palestinas, quienes sufren el ataque genocida del estado de Israel. Marchamos por el alto al fuego inmediato, por la paz y libertad del pueblo palestino y exigimos que el estado de Israel responda ante los organismos internacionales de derechos humanos.
Existen todavía en Puerto Rico condiciones que obstaculizan el disfrute pleno de los derechos de las mujeres, de las personas trans y LGBTIQ+. Marcharemos el 8 de marzo para afirmar estos derechos y nuestras luchas por la justicia. Marcharemos por justicia laboral y ambiental, por servicios de salud dignos y asequibles, por vivienda digna, por la educación con perspectiva de género y por nuestros derechos sexuales y reproductivos, por el acceso a la tierra y la soberanía alimentaria, por la justicia antiespecista. No descansaremos hasta que logremos la equidad, igualdad y libertades para todas las personas y seres sintientes.