Opinión

La descentralización y despolitización de Educación

Lee aquí la columna del presidente del Partido Popular Democrático

Una foto del representante Jesús Manuel Ortiz junto a su nombre.
Jesús Manuel Ortiz + columnista

Esta semana, presentamos y profundizamos en mi propuesta de Educación para el futuro. Al igual que mis padres y mis hijos, soy producto de la escuela pública. Es por eso que transformar el sistema de educación es un tema personal para mí.

PUBLICIDAD

Dos de los problemas de los que mucho se ha hablado, se ha prometido y nunca se ha cumplido son la despolitización y la descentralización del sistema. El alto nivel de politización que el gobierno de Jenniffer González y el Partido Nuevo Progresista (PNP) ha implantado en el Departamento de Educación es el primer obstáculo para que las escuelas públicas del país sean la mejor experiencia posible para los estudiantes. Es insostenible que los recursos del Departamento se gasten en operativos políticos y en reclutamientos excesivos de empleados de confianza. Eso tiene que acabar.

Por eso, me comprometo a meterle tijera a entre un 50% y un 75% del gasto en la nómina de confianza. Este representaría un ahorro de cerca de $16 millones en el próximo cuatrienio, que se invertirán en servicios directos a nuestros estudiantes. La política partidista no debe formar parte de la educación pública. Los recursos se dirigirán directamente a la escuela y a los estudiantes. Queremos más autonomía para las comunidades escolares, en donde el liderato de los directores y de los maestros del salón de clases sea el motor de la transformación del sistema educativo.

Por eso, y como parte de ese proceso de despolitización, encaminaré agresivamente la descentralización del sistema. Soy un fiel creyente en que la descentralización del sistema es el camino correcto. Empoderar a las comunidades escolares permitirá una mayor autonomía de las regiones, acercará los fondos a las escuelas y a sus estudiantes y permitirá una mayor flexibilidad en la implementación de programas educativos adaptados a las realidades locales. En palabras más simples, la única manera de mantener un hilo conductor en la educación de un menor desde kínder hasta cuarto año es colocando a su comunidad escolar como garante de esta experiencia educativa.

En mi gobierno, vamos a educar para el país que queremos. Es tiempo de contar con un sistema de educación que prepare a nuestros jóvenes para los retos del futuro. Ese es mi compromiso.

Más columnas por Jesús Manuel Ortiz:

Tags

Lo Último